Control biológico del lirio acuático
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- El 26 febrero, 2007
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Flor de huachinango, pato, aguapé, malangueta, lechuguín, cucharilla, jacinto o lirio acuático, es el nombre común que se le da a esta planta, presente en ríos, lagos, presas y cuerpos superficiales de agua en el país. Sus orígenes están en América del Sur, desde el río Amazonas hasta América del Norte. Además tiene presencia en el viejo continente; Africa, Japón, China, India y otros más están invadidos por este pernicioso vegetal.
Según investigaciones realizadas sobre el crecimiento y desarrollo de esta planta, se ha demostrado que tiene un ritmo de multiplicación acelerado, ya que en un periodo de observación (ocho meses en época de secas y dos en lluvias), una sola planta madre de lirio acuático reprodujo 438 plantas hijas en diez meses. El crecimiento está grandemente influido por los niveles de nutrientes en el agua, especialmente los niveles de nitrógeno, fósforo y potasio (Reddy et al. 1989, 1990, 1991). El incremento de estos elementos a menudo es causado porque una parte de los fertilizantes aplicados en el sector agropecuario alcanzan los cuerpos de agua a través de las descargas por drenajes agropecuarios.
Se puede deducir que en la mayoría de los cuerpos acuáticos donde existe lirio acuático se puede observar elevada contaminación del agua. Principalmente desechos líquidos municipales e industriales o contaminación con suelos erosionados y fertilizados. Por lo que al minimizar las emisiones de estos contaminantes, se podrá lograr disminuir importante crecimiento de esta maleza.
• Métodos de control
En la actualidad se emplean métodos para el control del lirio acuático, dentro de los que se puede mencionar el control manual, se usa cuando existe mano de obra abundante, que consiste en la extracción y almacenamiento de la planta para su incineración.
• Control mecánico
Cada año existe un programa de trituración por parte de la Comisión Nacional del Agua (CNA) en lugares donde se permiten estas condiciones, tal vez no es el método más adecuado, ya que esta planta sigue proliferando y manifestándose, lo que contribuye a la eutrofización de los cuerpos de agua, donde gran parte del material triturado es precipitado hacia el fondo del cuerpo acuático, donde se descompone, aumentando la demanda bioquímica de oxígeno (DBO).
• Control químico
Según Gutiérrez (1994), el glifosato y el diquat son los herbicidas que se utilizan para el control del lirio acuático. Su uso ha corroborado su efectividad en diferentes condiciones y comportamiento ambiental. Actualmente se cuenta con la experiencia de aplicación en sistemas acuáticos (1997); no obstante, se limita a sitios que justifican su empleo. Otro herbicida empleado es el aminotriazole, el cual requiere de un alto insumo de mano de obra y equipos mecánicos, por lo que puede resultar costoso.
• Control biológico
La lucha por la sobrevivencia ha puesto de manifiesto el efecto de los enemigos naturales que se desarrollan sobre el lirio acuático en su hábitat nativo, se restablece en el hábitat exótico a través del control biológico. Investigaciones y aplicaciones en países como Australia, Estados Unidos y otros establecen que seis artrópodos y tres hongos han contribuido al control biológico del lirio acuático (Harley y Wright 1984; Julien 1992), pero las especies que han resultado más exitosas son dos picudos (gorgojos): Neochetina bruchi y N. eichhorniae, y una polilla Sameodes albigutalis. Unica vía que brindará un efecto económicamente sostenible, sin efectos colaterales adversos sobre el medio ambiente, biodiversidad y sobre la salud humana.
• Control químico vs. control biológico
El doctor Ricardo Labrada, del Servicio de Protección Vegetal de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en la reunión regional de control integrado de lirio acuático 1997 menciona: «La mayoría de los países que han aplicado herbicidas han visto cómo este método sólo sirve para resolver una situación momentánea, pero que en modo alguno resulta ser una opción sostenible. Por un lado, las aplicaciones son costosas y, por otro, los daños al medio ambiente si se aplica año tras año». El método de control químico es efectivo para reducir drásticamente la infestación de lirio acuático y es útil para su uso en lugares donde se requiere facilitar la rápida navegación y la pesca, pero su utilidad es limitada en tiempo, ya que tal aplicación no previene futuras generaciones de maleza.
El control biológico basado en el uso de agentes biológicos, como los curculiónidos Neochetina Bruchi y Neochetina eichhorniae, el ácaro Orthogalumna terebrantis y el pirálido Sameodes albigutalis, ofrecen muchas ventajas. Una de ellas es que estos organismos llegados a un determinado número poblacional pueden reproducirse y desplazarse rápidamente en los cuerpos acuáticos en que se les libere. También el costo de su aplicación es bajo en comparación con el método químico y su establecimiento ayuda a mantener bajas las poblaciones de malezas.
• Experiencias en otros países
Países como Argentina, desde 1979, con la liberación de insectos Neochetina Bruchi en un lago invadido de lirio acuático, donde sólo había Sameodes albigutalis, encontraron en el control biológico mediante este método la limpieza de ese lago. Las actividades recreativas lograron un nuevo impulso con la creación de un club náutico, en el cual se desarrollan wind surf, navegación a vela y pesca.
La investigación sobre el control biológico del lirio acuático comenzó en 1961 y los primeros agentes de control fueron liberados en Estados Unidos, alrededor de diez años después (Perkins 1972, 1973). Actualmente se utilizan uno o más agentes de control en por lo menos 22 países (Julien 1992; Limón 1984). Como consecuencia, esta planta se ha controlado en algunos países y las infestaciones se han reducido en otros.
En Estados Unidos principalmente, en el Centro de Plantas Acuáticas de la Universidad de Florida, se desarrollan proyectos con este tipo de alternativas en ese estado y otros de la Unión Americana.
• Experiencias en México
Investigadores del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) han desarrollado proyectos desde la introducción y cría masiva de insectos Neochetina Bruchi y Neochetina eichhorniae.
Durante 1994 se acondicionaron las instalaciones de IMTA para cuarentenar estos insectos. Después de cumplir con los requisitos establecidos por la Dirección General de Sanidad Vegetal, se obtuvo el permiso correspondiente para la introducción (ese mismo año) de mil 200 insectos N. Bruchi. A finales de 1994 se liberaron mil 850 insectos; 5 mil 179 en 1995; 29 mil 450 en 1996 y 38 mil 425 insectos en 1997.
En Sinaloa, el doctor Germán Bojórquez, especialista en control biológico de malezas acuáticas de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), ha desarrollado proyectos de control biológico de lirio acuático en los diferentes distritos de riego de ese estado, lográndose excelentes resultados.
• Recomendaciones
La reunión regional sobre control integrado de lirio acuático, culminada el 27 de noviembre de 1997, con la participación de connotados especialistas de diversas partes del mundo, investigadores de IMTA y FAO concluyen y recomiendan: «El control biológico a través del uso de algunos enemigos naturales específicos del lirio acuático, tales como los gorgojos o picudos del género Neochetina, el pirálido Sameodes albigutalis y el ácaro Orthogalumna terebrantis, ha sido la práctica de mayor éxito en el control de la maleza en algunos países del mundo, como Australia y Africa del Sur. No obstante, su aplicación en América Latina es aún muy limitada en la mayoría de los países afectados por esta planta flotante, esto debido en gran medida al desconocimiento de las características del método por parte de las autoridades encargadas de la limpieza de los cuerpos acuáticos».
Por: José Luis Cota Burgos
Tlajomulco de Zuñiga, Jalisco México
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