“Tenemos un gran desafío y oportunidad de ser parte de la solución en la lucha contra el cambio climático”

El límite planetario está claro, estamos ante uno de los mayores desafíos que haya enfrentado jamás la humanidad y la respuesta del sector privado debe estar a la altura de este contexto

En el Día Internacional Contra el Cambio Climático, a 13 días de una nueva cumbre contra el Cambio Climático, y a 2625 días del año 2030, en el que los 195 países del Acuerdo de París se comprometieron a reducir sus emisiones de carbono un 45% respecto de los niveles del 2010, el desafío es cada vez más grande. La fecha nos invita a personas, gobiernos y compañías a la reflexión, pero también urgentemente a la acción.

Por séptimo año consecutivo, en 2021 la temperatura media mundial superó un 1,11 (+-0,13) °C los niveles preindustriales, según el informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) sobre el Estado del Clima Global. También se observa una clara tendencia en el alza de las concentraciones de los gases de efecto invernadero (GEIs). Según las Naciones Unidas, el 67% de estas emisiones están asociadas a la forma en la que vivimos y consumimos, por lo que un cambio en nuestros comportamientos es crucial para mitigar el cambio climático.

Los datos muestran que debemos actuar ya, hoy, y con rapidez para acelerar la acción climática. El dióxido de carbono es el responsable del 75% de la concentración de gases de efecto invernadero en el mundo, que retienen el calor en la atmósfera produciendo el aumento en la temperatura de la Tierra. Estos gases provienen de distintas fuentes como la combustión, el transporte, la generación de energía. La absorción de los GEIs se logra a través de sumideros de carbono, que son sistemas naturales o artificiales que absorben más carbono del que emiten. Los principales sumideros naturales son el suelo, los bosques y los océanos, que asimilan el carbono atmosférico y lo transforman en oxígeno.

El límite planetario está claro. Estamos ante uno de los mayores desafíos que haya enfrentado jamás la humanidad y la respuesta del sector privado debe estar a la altura de este contexto.

Desde hace 131 años el negocio de nuestra compañía está estrechamente vinculado con la naturaleza: los ingredientes principales de la cerveza nacen en el campo argentino, necesitamos materias primas para fabricar envases y utilizamos energía para elaborar, transportar y refrigerar nuestros productos. En este marco, este año asumimos el compromiso de ser una compañía carbono neutral a 2040 para el cual debemos reducir al máximo posible las emisiones de dióxido de carbono de toda la operación, neutralizar las emisiones residuales, y acompañar la descarbonización de nuestra cadena de valor.

Esto implica trabajar los días con un plan a largo plazo, con acciones concretas que impulsen el desarrollo económico sustentable de la Argentina. Con inversión, nuevas tecnologías e innovaciones que impulsen el desarrollo local y creen nuevos empleos de calidad. Construimos un parque eólico en Achiras, Córdoba, que nos abastece de energía renovable, y que es un aporte a la transformación de la matriz energética del país. También trabajamos con más de 1000 productores agropecuarios en buenas prácticas agronómicas bajas en carbono, como la agricultura regenerativa y orgánica, innovando a través del desarrollo de nuevas variedades de cebada con adaptación al cambio climático que permiten reducir el consumo de energía y agua.

“En todos los frentes climáticos, la única solución es la acción decisiva y solidaria”, ha dicho el Secretario General de la ONU, António Guterres, y no podemos estar más de acuerdo con esta visión. Estamos convencidos de que los cambios profundos no pueden lograrse si actuamos solos, sino por medio de la articulación público-privada, con organizaciones de la sociedad civil, la academia, otras compañías. La asociatividad, cada uno con su responsabilidad y su rol, pero compartiendo metas, es la oportunidad para lograr el desarrollo sostenible que las personas y el planeta tanto necesitan. Metas para, con la mirada puesta hacia adelante, actuar todos los días.

Sabemos que tenemos una gran responsabilidad, pero elegimos verla como una gran oportunidad ya que somos parte de este desafío y la buena noticia es que también somos parte de la solución y podemos actuar en consecuencia. De nosotros depende encontrar nuevas y mejores maneras de hacer las cosas.

Por: Vanesa Vázquez
La Nación
24 de octubre de 2022