Lombricultura en Argentina y algunas proyecciones para América Latina
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- El 1 enero, 2000
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La lombricultura constituye actualmente una actividad que, a juzgar por el incremento de las consultas y la demanda de capacitación, despierta un interés creciente. Se relaciona con el hecho de reconocerse la importancia ambiental y económica de la transformación en abono de una serie de productos de desecho biodegradables (estiércoles de herbívoros derivados de crías intensivas, remanentes de cosecha, ensilados, orujos,etc), generados en actividades agroindustriales y de otra índole (residuos sólidos urbanos, barros de depuradoras, etc.). El abono resultante del vermicompostaje de los mencionados residuos posee excelentes propiedades. Paralelamente, la situación económica por la que atraviesa nuestro país genera expectativas en actividades que permiten iniciarse con escaso capital, como es el caso de la lombricultura. Al respecto es importante un posicionamiento realista de la actividad (véase: Aspectos Económicos).
El cultivo de Eisenia foetida conocida como lombríz roja “de California” -a pesar de su origen Eurasiático- se utiliza con buenos resultados en Argentina. Un pionero de la lombricultura Argentina es Alberto Roth (Misiones, década del 50). Se desconoce cual especie cultivaba, pero probablemente no era E. foetida. Kim Gagliardi figura como el introductor de E. foetida en el año 1984 (en realidad la importó de Europa en dos oportunidades por que el primer lote no sobrevivió), pero sobre la base de datos de Righi, ya en 1979 se hallaba salvaje en las provincias de Santa Fe y Buenos Aires, desconociéndose de hecho como se introdujo en nuestro país. Esta especie, aparentemente, es la única que se utiliza con fines productivos. Frecuentemente, se menciona la presencia en lombricultivos de Lumbricus rubellus. Al respecto cabe acotar, que las veces que algún productor decía utilizar esta lombríz, al inspeccionarlas resultaban ser E. foetida.
A comienzos de la década del 90, era todavía una actividad incipiente. Actualmente existen lombricultores en la mayoría de las províncias, abarcando ámbitos tan diversos como, el doméstico, pecuario, industrial, la gestión de residuos sólidos y la investigación científica. Cada uno de ellos con problemáticas y perfiles propios, que en nuestro medio se hallan atendidos de manera dispar y a menudo viciados de prácticas extrapoladas de otras latitudes, con no pocos datos cuantitativos inciertos y/o erroneos, lo cual es particularmente evidente cuando se intentan aproximaciones a la fecundidad, y el potencial reproductor de Eisenia foetida,. No existe un relevamiento sistematizado de la actividad, lo que se relaciona con el hecho de ser exigible el registro solo en los casos de una producción comercial de humus que se inserta como enmienda en el mercado, de allí que, a modo de primera aproximación, el panorama en Argentina se presenta como se reseña a continuación
AGROINDUSTRIAL.
Abarca buena parte de los productores hortícolas orgánicos, flori-fruticultores, cultivadores de hongos, helici- rani- pisci -avi- cunicultura, engordes a corral, tambos, frigoríficos y emprendimientos relacionados con la elaboración de vinos, cerveza, azúcar, café. Se trata mayormente de microemprendimientos, PyMEs, los cuáles pocas veces procesan mas de 5 t/dia de materia orgánica (MO), como Nestlé (Magdalena, BsAs), que llegó abarcar unas 20 t/dia de borras de café.
La información disponible permite pautar de un modo preciso el manejo de los vermicultivos enmarcados en un proyecto específico, posibilitando que los resultados esperados se correlacionen con escasos desvíos de los objetivos pautados. Esta previsibilidad es posible a la luz de los avances en investigación sobre la biología de E. foetida (véase mas adelante).
RESIDUOS SÓLIDOS URBANOS (RSU) y BARROS CLOACALES.
La fracción orgánica biodegradable, en Argentina, suele superar el 50% (salvo en San Isidro -Bs.As. y Ushuaia-Tierra del Fuego, donde es algo inferior) del volumen de los residuos que moviliza el sector institucionalizado de la recolección, alcanzando en algunos casos el 70% (La Plata, Bs. As.). Una acción señera en el vermicompostaje de los mismos le cabe a Laprida (Bs.As.), Arata (La Pampa), Intendente Alvear (La Pampa) y algunas localidades de la provincia de Santa Fe. Se trata de municipios con 10.000 o menos habitantes. En localidades con mayor numero de habitantes, por regla general, el vermicompostaje de los residuos suele abarcar solo una fracción del tonelaje total, como ocurre en Trenque-Lauquen (Bs.As.), La Plata (Bs.As.) (menos de 20 t/día). Actualmente, en Buenos Aires, Chubut, La Pampa y Río Negro, son varios los municipios que pretenden implementar el vermicompostaje de estos residuos.
Sobre la base de una reunión en Cnel. Vidal (Bs. As., marzo 2000 ), en el marco del encuentro de municipios recicladores, resulta evidente que urge el establecimiento de normativas en cuanto al uso de los abonos resultantes. El eje de la discusión se focalizó en dos aspectos que no pueden desvincularse: las modalidades del compostaje y los criterios de calidad aplicables a los compuestos resultantes (humus) (Schuldt, 1995, 2000). Ambos aspectos exigen una integración ajustada y realista de teóría y práctica del compostaje (v. gr. extensión relativa de los procesos aeróbicos y anaeróbicos, asi como la conveniencia/inconveniencia de la fase termofílica). De lo contrario, existe el riesgo de canalizar -o inundar- al ámbito hortícola con humus de baja calidad y/o eventuales riesgos sanitarios.
El riesgo sanitario es particularmente elevado cuando la MO de partida resulta del tratamiento de los barros de depuración cloacal, conformando un producto que, solo considerando el contenido de huevos embrionados de helmintos parásitos, la mayoría de las veces, atendiendo normas vigentes de la EPA, no posibilita su utilización segura en horticultura (Alves-Dionisio, 2001). En Argentina, esta franja de MO recién se empieza a evaluar para el vermicompostaje (San Carlos de Bariloche, Río Negro).
INVESTIGACION
Existen aportes procedentes de grupos de investigación de al menos 5 regiones de nuestro país (Provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Rios, Santa Fe y Tucumán), vinculadas en mayor o menor mediada con las Universidades Nacionales y/o el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuria (INTA). Abarcan estudios sistemáticos, bacteriológicos y biológicos, posibilitando en los últimos años el esclarecer no solo aspectos relevantes del ciclo vital de E. foetida, sino asimismo delinear recomendaciones precisas para obtener lombricompuestos de calidad, haciendo en definitiva que las técnicas de compostaje recomendadas hace apenas un par de años, hoy se vean restringidas a usos y materiales específicos (predominio del compostaje aeróbico frente al anaeróbico, utilización de MO jóven -45 a 60 días postgeneración, etc.), pasando a la historia valores de fecundidad (las nunca documentadas y famosas 21 lombrices/cocón -cuando los valores observados son de 2 a 4, con algún sesgo inferior a 10/cocón) y longevidad (ya no 16 años, sino 4 -laboratorio, y poco mas del año -temperie).
ASPECTOS ECONOMICOS
El mercado del humus.
Sobre la base del mercado interno en Argentina, puede decirse en general que, el mismo se halla abastecido, existiendo una competencia importante para el que pretenda ingresar con su producto a las góndolas de los supermercados (fraccionado en bolsas de 2 a 10 dm3 -1 a 5 kg), donde el precio de venta al público oscila de 1 a 2 $ el kg.
A granel, embolsado (arpillera plástica de 60 dm3), sin desterronar ni tamizar, los precios varían desde 50 a 80 $ la tonelada -2m3. Por regla general, este humus es recogido directamente desde los sectores (cunas) con mano de obra del comprador. Desterronado y tamizado, vendido por el productor, cada bolsa permite su comercialización entre 8 y 10$ c/u, obteniendo por tonelada hasta 300 $. El problema es colocarlo en el mercado interno, aunque potencial y particularmente de la mano de los productores orgánicos la demanda crece, aunque la mayoría de estos productores elabora el lombricompuesto que consume.
El mercado externo, en cambio, se presenta auspicioso. De hecho Chile y Perú han concretado exportaciones a Europa, no así Argentina, si bien esta situación se prevée cambiará en breve. España e Israel demandan humus, si bien los precios son relativamente bajos y en torno a los 180$ la tonelada, valores que no obstante, con buen volumen y frecuencia permiten obtener rédito. Extraoficialmente se manejan precios de hasta 500$ /tonelada (países Arabes, Africa). El mantener calidad, cantidad y continuidad implica que la oportunidad para la exportación requerirá asociación, y en tal sentido, se han conformado recientemente cooperativas (Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe), tornando potencialmente viable esta alternativa.
La carne.
Una vez deshidratada,la lombríz se compone principalmente de proteínas -70%- de fácil digestibilidad (con una provisión adecuada de aminoácidos esenciales), hidratos de carbono (azúcares) y escasos ácidos grasos. La carne fresca puede utilizarse en alimentaciones intensivas (avicultura, ranas, piscicultura). Son interesantes las perspectivas futuras para la harina de lombrices, con miras a la integración de núcleos proteicos, aunque hoy no pueden competir con la harina de pescado. No sabemos si es un consuelo para Ud., pero las hamburguesas (de cualquier marca) no contienen harina de lombrices.
Para la elaboración de harina existen media docena de métodos, de los cuales resultan recomendables aquellos con menor injerencia de productos químicos, particularmente son interesantes los que basan en tecnología de frío. Para consumo humano requieren irradiación con radiación gamma para la eliminación efectiva de gérmenes, si bien antes de generalizar este uso falta aún investigación aplicada.
Sobre la base del peso húmedo se obtiene un 13% de harina. En Argentina, a juzgar por informaciones aparecidas en periódicos, pareciera existir una demanda de carne de lombríz (¿20 toneladas / mes?), que no se correlaciona con los datos de Comercio Exterior donde, aparentemente, se consigna solo una muestra de poco mas de 100 kg. enviada a un país árabe.
En cuanto a la cotización de la carne, poco se sabe. En el marco de una producción de humus, las lombrices surgen como subproducto, a razón de 8-10 kg por lecho y mensualmente, y al costo de 100 kg. de basura. Las lombrices se venden por lecho. Considerando el peso vivo de un lecho a saturación albergando 70-100.000 lombrices, con una estructura poblacional donde el 70-80% comprende animales subadultos y adultos, en el mejor de los casos tendremos 70 kg de lombrices. El lecho para siembra suele venderse a partir de 200 $.
Resultado económico.
Calculado sobre la base de una producción anual de solo 20 toneladas de humus, y con un ingreso extra por venta de 10.000.000 lombrices, arroja los siguientes guarismos (datos procesados por cortesía del Ing. Agr. Martín Ardenghi, UNLP):
1. Ingreso total 23.700$
Humus (fraccionado) y granel, y venta lombrices
2. Costos directos 6.570$
Compra de lombrices, alimentación, mano de obra, envases, energía, combustibles, certificaciones, análisis, amortizaciones directas (herramientas, zaranda), interés capital invertido (anual).
3. Margen bruto (1-2) 17.130$
4. Costos indirectos 900$
Impuestos, gastos mantenimiento mejoras, otros gastos (administrativos, asesoramientos).
5. Remuneración de la organización (anual) 14.400$
Ingreso Neto: 1.830$;
Rentabilidad = Ingreso Neto/Capital invertido x 100 = 1.830/3.500×100= 47%
Considerando la rentabilidad obtenida, el resultado de la actividad es interesante, siempre y cuando tengamos en cuenta las variables que hacen a la actividad en su conjunto y no nos tentemos con “reglas de tres simple” desvinculadas del mercado real.
CAPACITACION Y PROYECCION DE LA ACTIVIDAD EN EL MERCOSUR Y RESTO DE LATINOAMERICA
Un abordaje integral de la lombricultura debiera orientarse en un marco de capacitación y actualización permanente, abarcando desde aquellos que se inician hasta los cultores avezados. Las instancias de capacitación son diversas, comprendiendo cursos, eventos (jornadas, congresos, simposios) y los correspondientes foros de discusión.
Los cursos son muy importantes para el que se inicia, existiendo una amplia gama de ofertas que posibilita un acercamiento efectivo a la actividad.
Si nos referimos a los buenos cursos, no todos son iguales, lo cual es comprensible y deseable, ya que cada uno de los responsables le imprime su propio perfil. Un perfil que muchas veces poco tiene que ver con el título de quien lo da, sea idóneo, técnico o profesional, si bien el caudal de información y tecnificación de la lombricultura favorece al estamento de los profesionales y técnicos calificados que brindan propuestas en ámbitos con cierta garantía de excelencia (Universidades, INTA). Cabe alertar sobre la existencia de capacitadores relámpago”, que en el lapso de 60 minutos, o poco mas, añaden luz “confusa” a la lombricultura, y por el nada módico precio de 50 o mas pesos, y que a menudo consiguen “estirar” una pseudocapacitación sobre varias sesiones, con costos en torno a 300$, cuando por aranceles comprendidos entre 25 y 120 $ se puede acceder a los de mejor nivel de nuestro medio. Nunca esta demás procurar conocer los contenidos de las diferentes propuestas, quienes son los capacitadores y que instituciones respaldan la propuesta. Con esta información, el que busca capacitarse llega a buen puerto. Merecen preocupación también aquella/s empresa/s que pretenda/n comercializar “secretos de la actividad” (que por supuesto, no existen) a precios muy por encima de los del mercado.
Un ámbito que constituye una referencia para los lombricultores de todo el país es, sin duda, la Escuela Agrotécnica de Gral. Cabrera, Córdoba, donde en octubre último se celebraron las 11avas. Jornadas Nacionales de Lombricultura. El encuentro anual vincula las actividades de investigación y transferencia, posibilitando relacionar los que recién se inician con los expertos de las distintas áreas de la lombricultura. Este año se presentaron trabajos relativos a biorremediación, parámetros reproductivos, crecimiento, madurez sexual y potencial reproductor sobre la base de alimentar a las lombrices con distintas dietas. Paralelamente, se realizaron actividades de capacitación para quienes se inician. Una recomendación: no falte a las 12 avas. Jornadas Nacionales, que esperamos se realicen el 3er. viernes de octubre del 2002.
A mediados de noviembre, en Santo Angelo (Universidad Regional Integrada del Alto Uruguay y las Misiones, RS, Brasil), se desarrollo el; 1er Congreso de Lombricultura del Mercosur (2do. Congreso Brasilero y 4to. Gaucho), que contó con una nutrida concurrencia (con alumnos en torno a los 300 participantes) y la presentación de trabajos sobre manejo de estiércoles “difíciles” (cerdos, aves, barros de depuradoras) mediante vermicompostaje, utilización del humus en producciones agrícolas, agroecología e importancia de las lombrices para el suelo. Este excelente evento, contó además de los participantes provenientes de distintas regiones de Brasil solo con la representación de Argentina (Sosa y Schuldt, 2001), lo que no deja de ser curioso dado el crecimiento de la lombricultura en el resto del Mercosur y Latinoamerica, que al igual que en Argentina, se ha expandido tanto en los paises de la franja andina como en las áreas selváticas. Esperemos que el II Simposio Internacional a desarrollarse en abril del 2002, en Toluca (México) cuente con representantes de todo el continente.
A modo de colofón, puede decirse sin embagues que, la lombricultura hoy carece de limitaciones de índole técnica para su implementación, constituyendo una biotecnología limpia, de bajo costo, con amplias posibilidades para una inserción sustentable en el medio productivo.
REFERENCIAS
* ALVES-DIONISIO, J., 2001. Avaliacao da populacao de Minhocas (Oligochaeta) no solo. I Congresso do Mercosul de Minhocultura, Santo Angelo, RS, Brasil, noviembre 2001.
* Curso Internacional de Lombricultura. www.manualdelombricultura.com
* RIGHI, G., 1979. Introducción al estudio de las lombrices del suelo (Oligoquetos Megadrilos) de la província de Santa Fe (Argentina). Rev.Asoc.Cienc.Nat.Litoral, 10:89-155.
* ROTH, A., 1969. Instrucciones para la cría de lombrices de tierra. IDIA,(253):37-46.
* SCHULDT, M. y H. P. de BELAUSTEGUI, 1995. Consideraciones acerca del origen de los materiales destinados al vermicompostaje y su destino como abono. Necesidad de una normativa ad hoc. Actitudes recomendables para Argentina. Resúmenes 6ta. Jornada Nacional de Lombricultura (Esc. Agrotécnica Gral. Cabrera). Gral. Cabrera, Córdoba, octubre 1995.
* SCHULDT, M. El compostaje y los residuos solidos urbanos. Hojas verdes, 2(7):5-6. 2000.
* SCHULDT, M., 2001. Lombricultura. Teoría y práctica en el ámbito agropecuario, industrial y doméstico. Imprelyf, La Plata, 136 págs.
* SOSA, D.A. y M. SCHULDT, 2001. Lombricultura en Argentina. I Congresso do Mercosul de Minhocultura, Santo Angelo, RS, Brasil, noviembre 2001.
Por Dr. Miguel SCHULDT * y Ing.Agr. Domingo A. SOSA**
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