Las “Tierras Raras” y el complejo de escasez

I- INTRODUCCIÓN

Como sucede con frecuencia en temas relacionados con la minería, lo que sobra en Internet, así como algunos medios de difusión son opiniones con excesivo componente ideológico y que, a falta de alternativas, el público suele tomar por buenas.  Dado que se suele acusar a los técnicos de “fallas en la comunicación social” y puede haber algo de cierto en dicha afirmación (no estamos entrenados para eso) me gustaría experimentar haciendo un modesto aporte lo mejor fundamentado posible, para compensar en ínfima parte las habituales tergiversaciones sensacionalistas. Veamos como sale el experimento.

El suscripto cuenta con 7 meses de experiencia en la exploración de Tierras Raras.

A los colegas Geólogos, Ingenieros de Minas y Técnicos mineros en general, les pido comprensión y paciencia, pues lo siguiente no les está destinado. Muchos podrían hacer mejor aporte que quien suscribe, por lo cual acepto por anticipado sus críticas como parte del precio a pagar. Pido disculpas por el estilo coloquial, a que estamos poco acostumbrados.

II- LAS “TIERRAS RARAS”. APROXIMACIÓN AL TEMA. (sólo apta para legos).

Las llamadas “Tierras raras” o “Lantánidos forman un grupo de 14 elementos metálicos, cuyos extraños nombres raramente el público escucha mencionar. Químicamente son muy afines entre sí por lo cual tienden a aparecer asociados, pero a la vez cada uno de ellos muestra además otras propiedades especiales, que en los últimos tiempos comenzaron a ganar notoriedad. En primer lugar, el nombre es de lo mas inadecuado, pues no son “Tierras”, ni tampoco son tan “Raras”, lo cual suele interpretarse como “escasas”, por esa curiosa costumbre de atribuir automática “escasez” a toda materia prima mineral. En realidad el calificativo debería interpretarse como “curiosas” o “extrañas”, por sus inusuales propiedades.

Si bien unas pocas realmente escasean en la naturaleza, otras son tanto o mas abundantes que varios metales mas conocidos, como el Cobre, Plomo, Antimonio o Bismuto, por ejemplo.

Se las divide en dos grandes grupos: pesadas y livianas . Cada uno de ellos comprende 7 elementos, aunque algunos autores acostumbran incluir al Lantano, Escandio e Ytrio llevando el grupo a 17 integrantes.
    

En la naturaleza y tomadas en conjunto, las Tierras raras livianas son como mínimo 10 veces mas abundantes que las pesadas y con excepción del Europio, mucho mas baratas.

La producción mundial para todo el grupo es del orden de las 100-120000 Ton /año, pero menos del 10% del total corresponden a los elementos de mayor utilidad y demanda, mientras que el resto la tienen pobre o casi nula. Esto representa un problema, porque así como algunas Tierras raras son realmente “escasas”, hay otras que “sobran” y pasan a ser un estorbo de difícil disposición final, pues no se sabe que hacer con ellas aunque, por otra parte, conviene almacenarlas ya que en cualquier momento se les podrían encontrar nuevas aplicaciones industriales. Se está investigando el tema.
   
Según las informaciones mas recientes, de los 17 elementos clásicos, sólo el Neodimio y el Europio (dentro del grupo de “Tierras raras livianas”) o el Lutecio y Thulio (dentro de las “pesadas”) tendrían asegurada buena y constante demanda futura. En mucho menor grado interesan Terbio, Iterbio y Holmio.

Hasta hace un par de décadas se consideraba al grupo como “un conjunto de curiosidades inservibles”, pero sus aplicaciones fueron surgiendo con la investigación de nuevas tecnologías (comunicaciones, informática, electrónica, televisión, etc, etc). Su popularidad actual nace con la idea del paulatino reemplazo de automóviles con motor de combustión interna, por vehículos eléctricos y/o híbridos (mixtos) para ahorrar petróleo, minimizar emanaciones gaseosas en las grandes ciudades y disminuir el célebre “Efecto Invernadero”.

Se suponía que la iniciativa de fabricación de estos vehículos “ambientalmente amigables” despertarían interés y apoyo por parte de los grupos ecologistas, aunque hasta ahora no parece ser tan así.

Tales vehículos se apoyan en dos insumos estratégicos:

a-   Baterías superlivianas a base de Litio.
b- Aleaciones especiales, basadas justamente en algunos elementos del grupo de las “Tierras Raras”.

Según comentarios frecuentes, cada uno de estos nuevos vehículos necesitará entre 10 y 20 Kg de algunas de ellas (no todas), especialmente en semiconductores, superconductores y poderosos imanes para sus motores-generadores reversibles, etc, etc . Según esas estimaciones, en la próxima década se fabricarán en todo el mundo, alrededor de 8 millones de automóviles “ecológicos”y, por lo tanto, el consumo potencial de los cuatro elementos principales ( Neodimio-Europio-Lutecio y Thulio), mas dos o tres de los “abundantes”, estaría en el orden de las 8000 a 16000 ton anuales (20 Kg x 8 millones vehículos = 160 millones de Kg / 10 años) . Aunque importante, no es una cifra  inalcanzable o desmesurada. Mas bien el problema es: ¿Qué hacer con los excedentes inevitables de los otros 10 o 12 elementos que, por ahora no encuentran tanta aplicación ?.

China cuenta con casi el 40% de las reservas conocidas del planeta, pero ha sido el mayor productor y exportador mundial  (mas del 90%) durante los últimos 25 a 30 años. A partir de 2007 comenzó una política de restricción de sus exportaciones, generando una “corrida” de precios en los mercados occidentales que llegó a su máximo a fines de 2009. Como reacción lógica ante el temor a un generalizado desabastecimiento, las naciones industrializadas comenzaron investigaciones geológicas de campo buscando recursos alternativos, con resultados suficientemente alentadores para llevar cierta tranquilidad a los mercados. Aún cuando la demanda de Neodimio-Europio-Lutecio y Thulio sigue gozando de buena salud, durante 2010 los valores han bajado no menos del 25 a 30% y al parecer lo seguirán haciendo. Por Ejemplo: en el caso del Escandio (cuya cotización en diciembre del 2009, era un verdadero “escándalo”), prácticamente ha perdido el 85 % de su valor en sólo un año.

El siguiente cuadro (versión personal a partir de datos de J. Hedrick- USGS) da una idea de los valores a diciembre de 2009. Estos se refieren al metal refinado (Alta pureza: 99.99%). Se destacan los mas notables o importantes con color rojo. La “livianas” se destacan con fondo verde y las pesadas en fondo celeste.

Como se observará, en ese momento existían tres categorías de valores:

a- Los “Caros” (aquellos de más de 7000 U$S /Kg).
b- Los de “Bajo valor” (alrededor de 500 U$S /Kg  o menos). 
c- Los “Intermedios”(entre 1000 y 1500 U$S /Kg).

A fines de 2009, los dos mas costosos (Lutecio y Europio) valían unas ocho veces más que la Plata y una 5 veces menos que el Oro, es decir: son valiosos, pero no tanto como indican algunas fantasías.

 III-Los minerales portadores:

La minería de Tierras raras ha tropezado siempre con grandes dificultades técnicas por su baja o mala recuperación metalúrgica, lo cual ha limitado en gran medida su aprovechamiento y el desarrollo de nuevas tecnologías.

Si bien en la naturaleza hay bastantes minerales que contienen estos elementos, sólo 4 tienen valor comercial: Monacita y Xenotima ( Fosfatos de Tierras raras), Bastanasita (Fluor-Carbonato de Tierras raras ). En mucho menor grado el Pirocloro (un óxido complejo de Columbio- también llamado Niobio) puede contener Tierras raras.

Todos ellos son minerales químicamente resistentes y estables, es decir que se alteran muy poco en contacto con la atmósfera y, por ser pesados, se concentran muy bien en yacimientos de tipo Placer (de río o marinos) a semejanza del Oro, el Titanio o el Estaño.

En consecuencia, para el caso de yacimientos de roca dura (explotación a cielo abierto o subterránea) la mena molida se concentra generalmente por métodos gravimétricos. Estos no usan reactivos químicos (sólo agua) y tienen costos bastante bajos, pero durante años sufrieron de cierta reputación negativa por su tradicionalmente baja recuperación. Sin embargo, los avances técnicos van logrando superar dicho problema y poco a poco vuelven a ser competitivos. 
   
En el caso de la Bastanasita también se ha usado con éxito la flotación ( Ejemplo: en Mountain Pass -EEUU).

Los concentrados minerales de alta ley reciben un tratamiento químico basado en ácido sulfúrico, seguido de la precipitación del conjunto de sus óxidos para llegar a una forma comercial.

China cuenta con el yacimiento principal, pero además con gran cantidad de pequeñas minas que suelen emplear todavía técnicas artesanales de producción un tanto primitivas, a las cuales el mundo occidental considera “contaminantes”. Sin embargo, es justo reconocer que los asiáticos las están mejorando y comienzan a acercarse a los estándares internacionales. Por ejemplo: en la actualidad, de casi un millar de esos pequeños establecimientos, la gran mayoría están siendo cerrados y poco más de 100 estarían en condiciones de continuar operando bajo las nuevas condiciones.

Ya en el circuito industrial, el “Mix de óxidos” se somete a los pasos finales de procesamiento selectivo, bastante engorrosos, para separarlos uno por uno. Dentro de dicho “Mix” las proporciones contenidas de las diversas Tierras Raras pueden variar bastante y obtenerlas con alto grado de pureza es la parte mas costosa del proceso.

Por no involucrar grandes tonelajes, son procesos perfectamente controlables y hasta ahora no han representado problemas de impacto ambiental, al menos en los países industrializados (en general los europeos).

IV- Los Yacimientos.

Sólo se conoce un caso de un yacimiento explotado exclusivamente por Tierras raras (Mountain Pass en EEUU), pues en general son subproductos de la explotación de otros minerales más abundantes, con tres tendencias principales.

1. Mineralizaciones Ferríferas. (pueden contener también Oro o Manganeso)
2. Mineralizaciones Fosfóricas (pueden contener además Columbio, Uranio o Thorio).
3. Mineralizaciones de Fluor (generalmente acompañadas por Estaño y en menor grado Wolframio, Berilio, Tantalio o Columbio).

Puede haber tendencias intermedias o combinadas entre los tres grupos.

El yacimiento mas grande del mundo, Bayan Obo (China) pertenece al primer tipo y contiene mas de 1300 millones de toneladas de mineral de hierro de calidad bastante mediocre, pero con  casi 1% de Tierras raras (subproducto). Con esas cifras, habría allí entre 10 y 12 millones de toneladas de Tierras raras que, al ritmo actual son suficientes para mas de un siglo de consumo mundial.

El yacimiento que le sigue en importancia es el de Mountain Pass (EEUU), hoy por hoy oficialmente “agotado”. Pertenece al tercer grupo y apenas contenía 12 o 13 millones de toneladas de mineral bruto (100 veces menos que Bayan Obo)  pero con una ley de Tierras raras del orden del 10 a 12 % (10 veces mas rico que el mencionado). Como se comentó, es el único caso conocido que se haya explotado teniendo por objetivo a las Tierras Raras como mena principal. Una ventaja importante que tenía ese yacimiento eran las altas proporciones de Neodimio-Europio-Lutecio y Thulio con respecto a los otros elementos de menor utilidad, lo cual no es muy frecuente. Actualmente, siguiendo el viejo precepto de “la mejor mina es la que está abajo o al lado de la mina vieja”, se ha comenzado a reexplorarlo en profundidad (2010) y según trascendidos los resultados son muy alentadores. (A confirmar).

A raíz de la preocupación de la industria occidental, por encontrar fuentes alternativas a la casi total dependencia de la producción china (que hasta hace poco abastecía mas del 90% del consumo mundial), múltiples empresas comenzaron investigaciones del terreno en todo el mundo y, al parecer, los resultados mas promisorios hasta ahora se encontraron en el norte de Canadá, donde varios indicios favorables eran conocidos desde hace décadas (Ejemplo: el distrito Thor). También hubo interesantes hallazgos en Brasil, Sudáfrica, India y Australia (?). En consecuencia, ha cedido el temor, un tanto histérico, ante un eventual desabastecimiento por las restricciones Chinas, pues habría con qué reemplazarlas y así, con el “alivio”, el valor de dichos minerales disminuye día a día y se acerca a una tendencia mas previsible, estable y razonable.

Es un caso de “burbuja” especulativa parecida a la del Paladio respecto al Platino en 2000-2001, cuando Rusia hizo lo mismo que ahora intenta China y, por algunas semanas fabulosas, el Paladio se convirtió en el metal mas valioso del planeta.

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Dicho sea de paso y saliendo del tema: resulta curioso que en nuestro país, el Paladio (metal semiprecioso) sea legalmente considerado como “mineral de segunda categoría”.
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III. ¿Y en la Argentina? .

Los mejores indicios de Tierras raras se conocen desde hace décadas en las Provincias de Córdoba y San Luis (ésta última con el proyecto mas avanzado), pero como en ambas provincias se prohibió la minería metalífera, se iniciaron varios programas de investigación sobre todo en las regiones Cuyana y del Noroeste, que en algún caso continuarán, pese al enfriamiento del interés comercial por estos elementos.

Si bien fueron trabajos orientativos se detectaron sectores que, considerando sólo los cuatro elementos mas interesantes: Neodimio, Europio, Thulio y Lutecio, indican para “muestras aisladas” (algunas no tan “aisladas”) contenidos “equivalentes” de entre 50 y algunos cientos de U$S/Ton. Se hace notar que para otras mineralizaciones más clásicas, en áreas donde se presenten varias decenas de Hectáreas con mas de 50 U$S/Tonelada, perfectamente se podría pensar en aprovechamiento a “Cielo abierto”. Contenidos en el orden de “cientos de U$S/Ton” admitirían incluso laboreo subterráneo, pero en ambas situaciones depende siempre de la recuperación metalúrgica técnicamente factible y que, dada la habitual complejidad de estas mineralizaciones, los ingenieros tendrán que investigar caso por caso.

Sin embargo, como en otros países o continentes ya existen hallazgos de muy alta ley y/o de gran extensión, esas “primicias”cuentan con una fuerte ventaja comparativa respecto a los valores conocidos en Argentina que, hasta ahora, parecen ser “relativamente modestos” (personalmente creo que no es tan así). Habrá que esperar a que aumente la demanda mundial hasta que, tanto la atención como las inversiones, comiencen por fin a orientarse hacia estas latitudes.

 Conclusiones:

1. Pese al tono alarmista que cierto periodismo tendencioso gusta emplear para captar la atención del lector, las Tierras raras no son “recursos escasos” en el mundo, ni exclusivos de China. Por supuesto que las guerras del futuro NO SERAN para apoderarse de ellas, como algún trasnochado audaz llega a declarar (Ejemplo: Ver “La Voz del Interior” del 6/12/2010) ya que los recursos reales y potenciales en el planeta son mas que suficientes por ahora y hasta podría decirse que “abundantes” por largo tiempo (mínimo: décadas).
2. El problema se presenta mas bien con el destino de las Tierras raras “sobrantes”, con escasa utilidad y/o consumo, pero que habrá que almacenar preventivamente a la espera de nuevas tecnologías y aplicaciones posibles (lo cual sin duda sucederá en los próximos años, aunque llevará su tiempo).
3. Las perspectivas de recursos de Tierras raras en nuestro país son buenas, aunque sólo en el largo a mediano plazo, a no ser por algún descubrimiento inesperado, que no se puede descartar. Hasta ahora se conocen numerosas “áreas geoquímicamente anómalas”en territorio argentino, pero en la comparación con otras similares extranjeras no parecen ser tan competitivas, aunque eso puede cambiar paulatinamente. En otras palabras: se puede ser optimista pero con moderación.  

Sólo se conoce un depósito con rentabilidad dudosa (San Luis) pero ningún yacimiento o “área caliente” en lo inmediato.    La exploración sin duda logrará esos éxitos cuando lleguen el momento y las inversiones adecuadas. Probablemente a fines de la presente nueva década tendremos novedades y la historia será distinta.

Es mi opinión.

Por: Dr  Peralta E. H. (Geólogo)

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