Responsabilidad Social Empresaria y Dirección de Proyectos

El Green Project Management (GPM) es la inclusión de métodos sostenibles a los procesos mediante los cuales los proyectos son definidos, planificados, monitoreados, controlados, y entregados. Dado que los emprendimientos son esfuerzos temporales, realizados para lograr un único producto, servicio o resultado deseado, por su propia naturaleza ocasionan un cambio.

Como resultado de más de 70 años de experiencia combinada trabajando en la dirección de proyectos y atravesando muchos desafíos en materia de sostenibilidad, los fundadores de GPM experimentaron un cambio de paradigma de pensamiento que los redefine. El mismo comenzó cuando se dieron cuenta de que los estándares existentes para los directores de proyectos podían ser mucho mayores.

Este nuevo paradigma es fundamental para el GPM, el proceso, los estándares, la metodología, y en última instancia, para la oferta de productos educacionales y certificaciones que sirven de base.

Como todos los profesionales de la dirección de proyectos son conscientes, las metodologías existentes se concentran en un sistema de restricción triple, que se descompone en tiempo, costo y alcance.

La sostenibilidad no es una consideración directa.
El método PRiSM de GPM aborda la sostenibilidad, así como también el sistema de restricción triple utilizado anteriormente, y se basa en los estándares ISO y en las mejores prácticas globales que se alinean con el Global Reporting Initiative (GRI) y el Pacto Mundial de las Naciones Unidas.

Sin embargo, los proyectos que integran métodos sostenibles hacen más que sólo atender (gestionar) la sostenibilidad y la restricción triple, ya que permiten al director de proyectos focalizarse en los modos de entrega a través del impacto de los emprendimientos sobre las personas, el planeta y las finanzas con el proceso y también el producto.
Esto se conoce como el concepto ‘P5’, una herramienta crítica que asegura a la organización sus verdaderos logros de sostenibilidad. El beneficio y el impacto del cambio y la adhesión al ‘P5’ ayudan a las organizaciones a desarrollar una hoja de ruta hacia la sostenibilidad.

Como entidad de desarrollo profesional, miembro y contribuidora experta del Pacto Global de las Naciones Unidas y la ISO, GPM está trabajando para simplificar (reestructurar) y promover la aplicación práctica de la sostenibilidad a través de la dirección de proyectos. La consecución de las metas empresariales sin excluir a las futuras generaciones de la posibilidad de satisfacer sus propias necesidades.

Los estándares que incorpora GPM para la dirección de proyectos abordan estas necesidades.
Nuestros procesos, programas de capacitación y certificaciones llenan el vacío creado a partir de metodologías existentes que no están alineadas con el cambio en las necesidades sociales y en las demandas empresariales.

GPM tiene una posición única como líder. Es, en efecto, la única organización que ha ofrecido no sólo teoría sino métodos y herramientas prácticas, repetibles y medibles para ayudar a los directores de proyectos en cualquier campo del mundo.

Motor para el cambio

Como parte interesada en el plan estratégico de cualquier organización, el público representa a los accionistas, los clientes, los empleados, los proveedores, etc. Las organizaciones deben tomar nota de toda cuestión que el público vea como crítica, importante o notable.

Al adoptar un enfoque estratégico, las empresas pueden determinar cuáles son las actividades que cuentan con los recursos para ser socialmente responsables y elegir aquellas que reforzarán su ventaja competitiva. Mediante la planificación de la RSE desde la perspectiva de PRiSM, pueden asegurar beneficios y el aumento de valor para los accionistas sin eclipsar la necesidad de un comportamiento ético hacia sus grupos de interés y preservando sus modelos de negocio en forma sostenible.

La figura 1 representa la organización del proyecto y la relación con la estrategia organizacional y las operaciones, y cómo la oportunidad de negocio se transforma de un business case en entregable. Desde la perspectiva de los estándares, si la entrega es un producto nuevo o cambio en la organización, el éxito depende de la capacidad del proyecto para administrar el tiempo, costo y alcance.

PRiSM desafía esta idea mediante la inclusión de un marco de sostenibilidad que funciona para asegurar la calidad, que también es evaluada por la responsabilidad fiscal, ambiental y social y los impactos positivos, según estén definidos los objetivos y la estrategia de la organización.

Ejecución de una estrategia

Según la ‘Guía de Implementación de Responsabilidad Social Corporativa para los Negocios’ del Instituto Internacional para el Desarrollo de Sostenibilidad, hay seis pasos claves necesarios para la implementación de una política de RSE. PRiSM como método de proyecto está especialmente diseñado para soportar estos pasos, ya que cada uno es inherente a su diseño.

Al aprovechar las normas ISO 21.500 ‘Guía de Dirección y Gestión de Proyectos’, ISO 50.001 ‘Estándar de Gestión de la Energía’, ISO 14.001 ‘Estándar de Gestión Ambiental’, ISO 9.001 ‘Estándar de Gestión de la Calidad’, e ISO 26.000 ‘Guía sobre Responsabilidad Social’, el enfoque de PRiSM para la entrega de proyectos también puede servir como una hoja de ruta para la implementación de la estrategia de RSE.

Cuando se inicia un proyecto utilizando PRiSM, uno de los pasos claves es lograr una comprensión de la estrategia de la organización para garantizar que los objetivos del proyecto coincidan con la dirección en la que se está moviendo el negocio. Una vez que el aprendizaje organizacional y los objetivos se han revisado a fondo, se realiza un análisis de brechas con la matriz P5 de GPM. Este concepto se alinea con los 10 principios del Pacto Global de las Naciones Unidas y el marco de presentación de informes del GRI G4.

Es muy probable que toda organización vista como perjudicial al medio ambiente también sea observada como socialmente irresponsable. Por lo tanto, arriesga la relación con todos sus grupos de interés. Hoy en día, con la ventaja de compartir información instantánea, la comunicación y amplia capacidad para aprender y comunicar, más que cualquier otro tiempo, las empresas están bajo la atenta mirada de las partes interesadas, los consumidores y competidores.

La clave para el desarrollo de un programa de RSE, que sea a su vez sostenible, es utilizar métodos que aseguren el éxito. Tales métodos para lograr una estrategia exitosa deben basarse en sólidos principios de sostenibilidad que comienzan con la dirección de proyectos sustentables.

Si la organización que patrocina el proyecto no tiene una estrategia de RSE implementada, el análisis GAP (análisis de impacto P5 de PRiSM) proporcionará una línea de base inicial que sirve como evaluación para determinar la línea de base de madurez,
tal como se muestra en la figura 2.

Reporte, verificación y mejora

Una estrategia de RSE saludable incluye la dirección general (integrada) hacia donde la organización quiere ir, los intereses de los grupos de interés, el plan de trabajo, el establecimiento de prioridades, su alcance, los recursos que se utilizarán y el proceso para asegurar el éxito.

El equipo del proyecto, al que se le dio la tarea de implementar los cambios organizacionales requeridos, también se une a la estrategia. El uso del Plan de Gestión de la Sostenibilidad (PGS) de PRiSM proporcionará autoridad para que el equipo se adhiera a métodos sostenibles, mientras gestiona el análisis de las deficiencias, las medidas a desarrollar, implementar, verificar y mejorar. Las estrategias de RSE están modeladas a través de un documento vivo que se acopla al modelo de negocio y sirve como una herramienta para construir y reportar políticas a largo plazo.

El PGS también funciona como conector de memorias de sostenibilidad. El protocolo técnico GRI establece que la organización reportante debe incluir tópicos que tengan un impacto directo o indirecto sobre la capacidad de la misma para crear, mantener o erosionar su valor económico, ambiental y social, el de sus grupos de interés y el de la sociedad en general. El PGS está diseñado para comunicar los beneficios organizacionales derivados de los proyectos a la estructura de reporte GRI G4, y al usarse destapará maneras innovadoras de evaluar el desempeño, manteniendo una clara conexión con la estrategia de negocio (creación de valor).

Como las organizaciones necesitan ver los beneficios de su reporte de sostenibilidad, los proyectos vinculados proporcionarán información útil, datos procesables y comunicaciones estratégicas.

Con estos beneficios a cuestas, es fácil demostrar el retorno sobre la inversión y elevar a la dirección de proyectos como una función estratégica.

Múltiples beneficios

Un plan de gestión de sostenibilidad PRiSM estándar incluye un resumen ejecutivo, un listado de los objetivos de sostenibilidad del proyecto, indicadores de desempeño y de medidas claves (abientales, de finanzas, de productos, de procesos y sociales), la evaluación de impacto ambiental, las exclusiones al alcance, medidas de gestión de riesgos de sostenibilidad, y revisiones y requerimientos de informes.

Al igual que con cualquier otro aspecto del desempeño del negocio, la implementación efectiva de la RSE requiere el establecimiento de objetivos cuantificables. Un actor podría establecer la meta personal de “ganar un Oscar”, pero que con frecuencia se fijan objetivos más alcanzables, intermedios, tal como “conseguir lanzar una película”. El enfoque de una empresa para establecer objetivos mensurables ambientales, económicos y sociales, y el seguimiento de éxito en su cumplimiento, no difiere mucho del enfoque de un actor.

Aunque no existe un modelo de talla única para todos en la implementación de la RSE, existe un valor considerable en el aprovechamiento del método PRiSM para la entrega de los proyectos. Dado que el marco de referencia integra la toma de decisión económica, social y ambiental, está íntimamente relacionada con la eficaz gestión corporativa.

Así, la organización se halla en posición de obtener beneficios óptimos para sí misma, sus accionistas y consumidores a través de la implementación de una política de RSE exitosa a través del método PRiSM.

Por: Joel Carboni, Jeff Hodgkinson
Fuente: Revista Futuro Sustentable

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