La paranoia antirrepresas
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- El 3 junio, 2011
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Una provincia como Misiones, que es abastecida en más del 95 % por energía hidroeléctrica, en la cual con muchas falsedades, tergiversaciones y mala fe, se haya instalado en mucha gente la oposición irracional a toda obra hidroeléctrica; lo que es tan incoherente como si en Argentina se impusiera el odio a los cultivos de trigo, que es sin duda la base de la alimentación de la población argentina.
Lo notable del caso es que la base de las oposiciones son ideas inculcadas como verdades –supuestamente- absolutas, sobre las cuales los activistas y adherentes se niegan a todo razonamiento lógico y menos aún a toda evaluación con basamentos científico;, adquiriendo un cariz de cerrado fundamentalismo, como si los temas energéticos y ambientales tuvieran carácter religioso.
Alentada por varios “vivillos” de la politiquería fácil, muy hábilmente fogoneada en forma sistemática por varias ONGs transnacionales pseudo ecologistas formadas al amparo de las políticas de acciones orquestadas por el poco conocido Club de Roma, impulsada por los muy poderosos intereses vinculados con las petroleras transnacionales de origen anglosajón (las mismas promotoras de guerras, invasiones y masacres diversas), y ampliamente difundida con diferentes grados de sutileza por muchos medios de comunicación manejados o financiados por esos mismos intereses, la oposición sistemática cargada de fanatismo irracional –incluso con militantes “verdes” violentos con mentes enceguecidas por el fanatismo irracional-, bien puede conceptualizarse como la paranoia antirrepresas.
Es sin duda una clara resultante del accionar de fuertes intereses megas económicos, que llevó a la cooptación mental –verdaderos lavados de cerebros- de muchos militantes tan enfervorizados como faltos de fundamentaciones concretas y científicamente demostrables.
Mezcla grosera de falsedades entronizadas como “dogmas sagrados” de la neoreligión pagana en la cual han convertido al ecologismo fundamentalista y cavernario, sus manipuladores han logrado que en nombre de difusas pautas “en pro de un mundo mejor”, lograron amontonar disconformes sociales de distintos tipos y pelajes, consiguiendo que con sus vociferantes accionares “en contra del capitalismo” y “del mundo consumista”, esos mismos fanáticos alienados sean dóciles marionetas…al servicio de los gigantescos grupos de poder político y financiero que operan a favor de la globalización salvaje…¡la quintaesencia del “capitalismo” que la mayoría de los “ecologistas” dicen aborrecer!
Resulta notable que esos mismos enfervorizados militantes del fundamentalismo ecológico, se niegan a aceptar que son utilizados como dóciles marionetas, manipuladas también por las grandes petroleras transnacionales, principalmente anglosajonas, que no por casualidad son grandes “esponsoreadores” de las ONGs que operan a escala mundial; como tampoco es casualidad que las más activas de esas ONGs que actúan en Argentina, han sido creadas por y son operadas desde o claramente a favor de Gran Bretaña, como puntas de lanzas para mantenernos atados al subdesarrollo crónico, y para sembrar odios y confusiones internas; uniendo en ello sus acciones con las de otros tipos de ONGs (indigenistas ultras, “derecho – humanistas”), las cuales no por casualidad cuentan con avales, financiaciones y promociones del G 7, particularmente del “núcleo duro” europeo de esas naciones.
Dentro de las mayores contradicciones –tozudamente no reconocidas por los fanatizados militantes de base de la ecolatría-, están tres indefendibles realidades.
1) Al oponerse a la generación hidroeléctrica y nuclear, benefician a los poderosos intereses petroleros transnacionales, con lo cual favorecen la más contaminante de las alternativas de generación de base, que es la termoelectricidad (la que quema combustibles fósiles).
2) Proponen supuestas “soluciones totales”-eólicas, solares, hidrógeno, biomasa, micro centrales, etc.-, que además de ser carísimas por KWh, están llenas de limitaciones técnicas, por lo cual no son sustitutivas sino tan solo complementarias de las tecnologías convencionales de generación.
3) Siendo que muchos de los “ecologistas de base” (los más enfervorizados) son fuertes críticos “anti sistema” (marxistas huérfanos de causa, anarquistas, o resentidos sociales varios); sus anteojeras mentales les impiden ver que son manipulados, usados y material de choque descartable, al servicio de la globalización salvaje; o sea peones dóciles del “mega capitalismo” al cual dicen aborrecer.
Oponerse a utilizar el abundante y renovable potencial hidroeléctrico de Misiones y el NEA, es tan irracional como si una provincia petrolera y gasífera se opusiera tenazmente a la explotación de sus yacimientos de hidrocarburos.
Las mismas conclusiones, con otra matriz eléctrica –predominantemente termoeléctrica-, son aplicables para el caso de toda Argentina.
Por: C.P.N. Carlos A. Ortiz
Investigador de temas económicos y geopolíticos
Ex Investigador y Docente = Facultad de Ciencias Económicas = UNaM
Especialista en Gestión de la Producción y Ambiente – Fac. de Ing. = UNaM
Tesista de la Maestría en Gestión de la Energía = UNLa – CNEA
Docente de Economía – Esc. Normal 10 – Nivel Terciario
Docente de la Diplomatura en Geopolítica – Inst. Combate de Mbororé
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