11 – Reforma de la política del medio ambiente y salud

A la hora de evaluar si una determinada aplicación de la radiactividad es aceptable, es preciso sopesar las ventajas sociales y económicas, y los posibles daños para la salud. La previsión desempeña en este ámbito un papel importante.

En 1994, después de extensos debates en el seno del gobierno, se decidió cerrar la central nuclear de Borssele a finales del 2003. La continua inquietud social respecto a las consecuencias de posibles accidentes y el problema aún sin solucionar del almacenamiento definitivo de los residuos radiactivos desempeñaron un papel en esta decisión. El gobierno mantiene la fecha de cierre acordada para la central de Borssele. En 1997 se cerró la central nuclear de Dodewaard y se están haciendo los preparativos para desmantelarla.

En el tercer documento sobre la energía se dice que la energía nuclear está fuera de las posibilidades de los Países Bajos. Al mismo tiempo, el documento indica que es necesario mantener los conocimientos nucleares presentes para vigilar las instalaciones nucleares existentes y a la larga desmantelarlas, para solucionar la cuestión de los residuos radiactivos y apoyar la política contra la difusión de armas nucleares (no proliferación).

Los incidentes con uranio empobrecido han generado mucha inquietud social. Ejemplos de ello son el desastre ocurrido en el barrio de Bijlmer y el uso de granadas con uranio empobrecido por parte de la OTAN. Hay mucha preocupación entre los implicados directos y siguen las quejas. Será preciso prestar más atención a esta cuestión. De toda la radiactividad que recibe una persona en término medio en los Países Bajos, una tercera parte la recibe en la vivienda: radiación de los materiales de construcción como el cemento y los ladrillos, y por la acumulación del radón gaseoso. Por el uso de materiales de construcción con poca radiación e instalaciones de ventilación adicionales se reducirá la cantidad de radiación de una vivienda.

El Consejo de Sanidad ha escrito sobre los efectos para la salud de la radiación electromagnética. Parece existir una relación entre el vivir cerca de líneas eléctrica aéreas y un ligero aumento del número de casos de leucemia en niños. La reciente investigación en Gran Bretaña y la investigación del Instituto holandés de Salud Pública e Higiene apuntan en la misma dirección. Estas señales constituyen suficiente motivo para realizar más investigaciones y para tomar medidas adecuadas. En el caso de las antenas de GSM, y sobre la base de los actuales datos científicos, el Consejo de Sanidad no espera efectos negativos sobre la salud. En los últimos tiempos ha surgido mucha inquietud entre los vecinos en torno a estas antenas, que a menudo se instalan en lo alto de edificios en las zonas urbanas. Será preciso fijar normas para los campos electromagnéticos de las antenas. La colocación de antenas en edificios de viviendas sólo es posible con el consentimiento de los vecinos.

POLÍTICA PARA LA BIOTECNOLOGÍA

En la aplicación de la biotecnología es importante conocer al máximo sus efectos. Ello es necesario para poder sopesar adecuadamente los posibles riesgos y la utilidad social deseada. A la hora de sopesar, el principio de previsión desempeña un papel central. Además, el libre acceso a la información y la toma de decisiones es uno de los pilares de la política gubernamental.

En los próximos años, la Administración Pública quiere dar un impulso a los conocimientos sobre biotecnología (y la innovación en este ámbito) con el plan de acción Life sciences. Al mismo tiempo se limitará o prohibirá el uso de genes resistentes a los antibióticos en las plantas. La Comisión de Modificación Genética se amplía con expertos en el ámbito de la ecología, la ética y las ciencias sociales. En la evaluación de los riesgos se prestará una atención explícita a las incertidumbres científicas. A fin de garantizar la libertad de elección del consumidor, se aspirará a nivel europeo a un etiquetado lo más completo posible de productos que contengan organismos genéticamente modificados (o sustancias procedentes de los mismos).

POLÍTICA PARA LA SEGURIDAD ALIMENTARIA

En el ámbito de la seguridad alimentaria, la Administración Pública desempeña un papel importante. El consumidor exige garantías de la calidad de los alimentos. Si existe un riesgo plausible, aunque aún no demostrado científicamente, con posibles consecuencias para la salud del ser humano o para el medio ambiente, prevalece el principio de previsión. A escala mundial están surgiendo cada vez más acuerdos sobre los alimentos. Los Países Bajos estimulan la firma de acuerdos que mejoren la seguridad alimentaria.

Desde finales del 2000 existe un Comité Interdepartamental sobre Seguridad Alimentaria. En él se hallan representados todos los ministerios implicados. Dicho comité examina atentamente la política de seguridad alimentaria e informa anualmente al gobierno y al Congreso de los diputados. En caso se producirse un incidente, el comité coordina las medidas necesarias.

PROGRAMA DE LA POLÍTICA DEL MEDIO AMBIENTE Y SALUD

Continuamente se presentan nuevos riesgos, porque se desarrollan constantemente actividades nuevas y se amplían las zonas de riesgo por la influencia mundial del mercado. Además, se está produciendo un desarrollo social hacia una menor aceptación de riesgos que las personas no han elegido por sí mismas. Los recientes desastres e incendios (Bijlmer, Enschede, Bovenkarspel, Drachten) y problemas alimentarios (pollos con dioxinas, vacas locas) han repercutido negativamente en la confianza en la Administración Pública.

Los riesgos pueden dividirse en diversas categorías que exigen un enfoque propio:

• Riesgos previsibles, que en cierta medida pueden controlarse y posiblemente evitarse. Se trata de riesgos que pueden predecirse y contra los cuales, en principio, pueden tomarse medidas eficaces. El enfoque se halla en la esfera de la prevención.
• Riesgos previsibles, difíciles de controlar y que a veces no pueden evitarse. Previsible, pero también difícil de controlar, es por ejemplo el hecho de que debido al calentamiento de la Tierra aumenta la posibilidad de que determinados organismos en nuestro entorno (cianofícea, botulismo) proliferen de forma explosiva.
• Riesgos no previsibles, difíciles de controlar y que apenas pueden evitarse. Ejemplos de ellos son las recientes epidemias de HIV (virus de inmunodeficiencia humana) y legionela. Los organismos nuevos, que provocan enfermedades infecciosas para el ser humano surgen de forma espontánea, por ejemplo de organismos afines y conocidos. Debido a las circunstancias creadas por el ser humano también es posible que los organismos tengan la oportunidad de reproducirse de una forma tan explosiva que constituyan un peligro (la bacteria de la legionela). Entre las posibles soluciones cabe mencionar la creación de un sistema de señalamiento y el establecimiento de una estructura para actuación aguda en caso de que algo salga mal inesperadamente.
• Riesgos combinados. Muy complejos son los riesgos que sólo se sospechan, pero sobre los cuales no se sabe casi nada. Un ejemplo es el posible daño de una exposición combinada a diversos factores de riesgo (sustancias, radiación, etc.), mientras que ninguno de los factores por separado provoca daños. El enfoque de los riesgos combinados se concentra en primera instancia en la investigación de los posibles efectos.

Las diferentes categorías de los efectos mencionados exigen un refuerzo de la investigación, y de forma que se puedan detectar antes los riesgos y peligros. Por el momento están saliendo a la luz muchas señales sobre posibles riesgos a causa de incidentes. Después se adaptará la política en general y la normativa derivada de ella. Una búsqueda más estructural puede evitar incidentes.

La Administración Pública ha de mostrar qué incertidumbres existen y cómo intenta controlarlas. Para responder eficazmente a la inquietud en torno a los riesgos, es importante que la Administración Pública sepa cuáles son las preocupaciones de los ciudadanos. No basta con limitarse a reaccionar a las señales.

FINANCIACIÓN

Para la financiación del programa de la política del Medio Ambiente y Salud se destinarán hasta el 2010 45 millones de florines (20 millones de euros). Los fondos se obtendrán de unos fondos adicionales en el presupuesto del ministerio de la Vivienda, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente para el NMP4. Para reforzar el papel médico ecológico en los GGD (Servicios Médicos y Sanitarios Municipales), hasta el 2010, se pondrán a disposición 45 millones de florines (20 millones de euros). Este importe es financiado con el presupuesto del Ministerio de Salud, Bienestar y Deporte.