Torpe intento de culpar a Botnia

El 22 de febrero pasado apareció una noticia en el portal de información Seprin.com una denuncia sobre reacciones alérgicas ocurridas en 100 personas que se bañaban en el balneario Ñandubaysal. Como le diría Don Ramón al Chavo del 8: Torpes!

Seprin.com es un servicio de informes sobre la actividad política argentina que por lo general está muy bien informado. Pero ya varias veces lo hemos pescado comprando “carne podrida”, especialmente de temas que están fuera de su experticia, las andanzas de los servicios de “inteligencia” argentinos (o nula inteligencia?) o las tropelías de funcionarios y políticos. Reproducen una nota tomada de nada menos que en “El Día” de Gualeguaychu, fuente de informada sesgada, si las hay. Dice así, y sólo unos extractos porque el tema ya aburre. Si a alguien le interesa la nota completa léala en el sitio de Seprin.com, o en una ampliación en el mismo El Día:

Las muestras de balneario Ñandubaysal
serán analizadas en tres laboratorios

Lo sucedido el sábado a la tarde en el Balneario Ñandubaysal –entre las 16 y las 20 horas aproximadamente- originó preocupación en turistas, responsables de la playa, funcionarios de la municipalidad y en la Asamblea Ambiental. No es común que 100 personas presenten una reacción alérgica al ingresar a las aguas del río Uruguay

Por Rubén Skubij

Visitantes, gualeguaychuenses y guardavidas tuvieron irritación de piel y fuerte picazón, lo que pudo comprobar el enfermero del lugar, Juan José Traverso. Consideró que ‘algo raro’ estaba pasando, como señaló en su edición de ayer El Día. Solicitó que se retiraran a todas las personas de las aguas por prevención.

Personal de Vigilancia Ambiental del municipio y de la Prefectura se hicieron presentes en el lugar y tomaron muestras para ser enviadas a los laboratorios de la Universidad de La Plata y de Buenos Aires para los estudios correspondientes.
[…]
Martín Alazard, asambleísta, explicó a este matutino que “Hay que analizar en forma urgente las muestras. No es común que pase esto en el Ñandubaysal, lo reconoció el propio enfermero. Evidentemente que algún componente químico estaba en el agua porque la gente que no se metió en ese momento no tuvo inconvenientes.”

Acotó que “el río está alto y con una intensa velocidad por lo que no hay que hablar de algas”.
[…]
Consultado sobre si se podía relacionar el episodio con la contaminación que Botnia produce al río Uruguay, consignó: “no ha pasado anteriormente al funcionamiento de la fábrica, todos sabemos que Botnia contribuye con grandes cantidades de fósforos y nitrógenos a diario, y eso puede favorecer la floración de algas. También puede tener que ver con la gran cantidad de químicos que arroja la pastera al río Uruguay”.

En mi mente surgió la enorme duda de si alguien se le había ocurrido pensar que los compuestos químicos que causaron la alergia podían en realidad provenir de la desembocadura del Arroyo Gualeguaychú, al que las industrias del Parque Industrial y la ciudad de Gualeguaychú descargan sus inmundicias. ¿Habrán tomado muestras de las aguas del arroyo también? Porque si no lo hicieron corren el riesgo de pasar otro de los innumerables papelones públicos al que nos tienen acostumbrados.

Abajo tenemos una vista aérea de la región de Gualeguaychú, Ñandubaysal, Fray Bentos y Botnia, donde observamos que el arroyo Gualeguaychú descarga sus sucias aguas directamente en la bahía donde está el balneario Ñandubaysal.

Además, la flecha roja indica la trayectoria que siguen las aguas del Río Uruguay que han pasado frente a Botnia llevando sus efluentes y, dado que el río viene muy crecido y con enorme caudal, la velocidad de las aguas es muy alta. No se producen remolinos ni contracorrientes en dirección al balneario. Además, como el nivel del río está alto con la creciente, la correntada principal forma un verdadero dique que embalsa y concentra los efluentes del Arroyo Gualeguaychú sobre el área del balneario. Me intriga saber por qué la gente insiste en bañarse a la salida de una cloaca…

¿Algún día veremos los resultados de los análisis? ¿Qué pasará si se encuentran restos de metales pesados, cromo, plomo, níquel, o algún otro tipo de residuos tóxicos que las industrias del Parque Industrial Gualeguaychú lanzan desaprensivamente al arroyo?

Yo creo que este asunto ha ido demasiado lejos y hay acciones penales que la Justicia argentina debe iniciar contra los responsables de esta vergüenza nacional que es ya el corte del puente internacional a Uruguay, algo que nuestra Constitución prohíbe de manera explícita. Pero una cosa es lo que la gente racional cree y otra cosa es lo que la Constitución Argentina es en realidad. Nunca pensó Juan Bautista Alberdi que su obra magna sería un día algo obsoleto. La Constitución es de chicle, se estira, se acorta, y se moldea a gusto y piacere del mandamás de turno.

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Actualización Miércoles, 24 de Febrero 2010: Un comentario al pie de esta página nos pide que hagamos aportes de pruebas y no elucubraciones. Sería bueno que lo mismo pudiese hacer la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú, que tanto dice preocuparse por el ambiente, pero hasta la fecha nada hemos podido ver al respecto fuera de “elucubraciones” y denuncias que no han soportado la menor investigación posterior.

La primera foto de Google Earth mostrada más abajo -que no es una organización de “mano de obra desocupada” ni de “extrema derecha reaccionaria”– muestra algunos detalles que apoyan nuestra sospecha (no es una denuncia!) de que los problemas de alergias de los bañistas de Ñandubaysal tienen muchas más probabilidades de haber sido causados por los efluentes cloacales y/o industriales que el Arroyo Gualeguaychú) y otros depósitos de residuos orgánicos mostrados en las fotos) ponen a disposición de los turistas de Ñandubaysal.

La foto que sigue muestra en detalle la desembocadura del arroyo sobre el balneario, que trae los efluentes cloacales e industriales de la ciudad.

A continuación un gran canal de desagüe en la misma ciudad de Gualeguaychú que descarga sobre el arroyo material sin tratamiento de ninguna clase. Qué bueno sería que la Asamblea tomase muestras de esas aguas y de las que desembocan en el balneario, las enviase a analizar a laboratorios independientes (o a dos distintos para cruzar los resultados) y así todos podemos salir de dudas.

Y por último: se ve en esta última foto a la playa del balneario Ubici, de Fray Bentos, justo al frente de la planta de Botnia y a muy escasa distancia de la descarga de los efluentes de la planta. Ninguna ONGs ecologista de Uruguay ha hecho denuncia alguna sobre efectos en la salud de los bañistas de ese balneario. Curioso, no?

Post Data: Estamos seguros de que en el blog http://elojodelarazon.blogspot.com/ figuraremos como miembros de la ultraderecha reaccionaria argentina, mano de obra desocupada al servicio de las industrias del papel, las mineras, las petroleras, las tabacaleras, las centrales nucleares, los sojeros, y hasta frigoríficos fabricantes de salames, con perdón de los asambleístas, que no son fabricados por los frigoríficos sino producto de un cruce entre Pachamama y Madre Gaia.

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Actualización II: Jueves 10 de Febrero, 2010 Gualeguaychú y Ñandubaysal que está a 15 km están en estado de desastre ambiental y sanitario por un masivo colapso del sistema cloacal. A esta altura no hay nada más que discutir sobre el punto.  La calidad sanitaria de las playas de Fray Bentos que está al lado de Botnia es excelente. La de Gualeguaychú que está a 30 km es de desastre sanitario. A confesión de partes relevo de pruebas. Esto es lo que dice hoy 25 de febrero de 2010 el  vocero piquetero “El Día” de Gualeguaychú.

El agua con líquidos claocales fluye desde varias bocas de tormenta y se expande por un vasto sector del norte de la ciudad. Los olores se hacen insoportables y la gente clama por una solución.

Varios vecinos del norte que viven en zona del Canal Clavarino y aledaños se reunieron el pasado martes en el Salón Azul con el Intendente Juan Bahillo y el técnico de Obras Sanitarias  Federico Villanueva, oportunidad en que plantearon con urgencia una solución a los problemas de líquidos cloacales que desbordan desde las bocas de tormenta, generan inconvenientes a toda la población y provocan preocupación por las consecuencias sanitarias sobre todo para niños y ancianos.

Las obras del Canal Clavarino fueron muy festejadas pero luego de finalizadas dejaron un saldo negativo: no se tuvo en cuenta los desagües pluviales y las cañerías de cloaca resultan insuficientes ante el enorme caudal de las conexiones de centenares de domicilios de la zona.

El problema hoy está en las calles, pero cuando el río sube o caen lluvias copiosas son muchos los domicilios que se inundan por los sanitarios.

Calle Clavarino, Guido Spano, Misiones, Juan José Franco, 1º de Mayo, Victoria son, entre otras, las arterias comprometidas en una problemática sanitaria que queja a muchos vecinos.

Desde el gobierno, Bahillo atendió las quejas y en principio anunció una obra de cañería alternativa de cloaca en calle Franco para aliviar la situación, aunque habrá que esperar nuevas obras de saneamiento para el segundo semestre del año.

El Intendente anunció que el colector cloacal norte podría ejecutarse durante este año y esto permitiría resolver el problema de fondo.

Junto al problema del saneamiento existe el drama del estado de las calles en el barrio franco. Hay arterias que requieren de un repaso al menos de una motoniveladora y para permitir el escurrimiento de las aguas servidas y de lluvia un zanjeo adecuado.

En principio se hará un tendido de una cañería para cloaca de 160 mm de diámetro a fin de aliviar la evacuación de las cloacas en el punto neurálgico (troncal) de calles Misiones y Juan José Franco.

Por: Eduardo Ferreyra
Presidente de FAEC