La necesidad de que una política ambiental sea pública

La creciente importancia que le ha dado la sociedad al medio ambiente cambió el pensamiento corporativo respecto de sus políticas con el medio ambiente.

El tema que atravesó a la sociedad logró modificar los criterios, objetivos, procedimientos y producción y comenzaron a tomar relevancia políticas llamadas “verdes” y fundamentalmente dirigidas al consumidor con preocupaciones ecológicas.

Actualmente, cada vez más productos protegen y publicitan su protección al medio ambiente, su mismo envase está gravado con la inscripción de biodegradable. Cuadernos de papel reciclado, desodorantes sin gases, combustibles menos contaminantes y la sustentación internacional brindada por las normas ISO 14.000 consolidan estos procedimientos enunciados en el Desarrollo Sustentable. Todo este aluvión de cambios son moneda corriente en el nuevo siglo.

El entorno y la conveniencia de protección del Medio Ambiente produjo no solo  cambios sociales en los productos y servicios.

Las plantas industriales deben tener más en cuenta que nunca cómo se minimizan sus residuos sólidos y se generan parámetros compatibles con la emisión y descarga de sus efluentes líquidos y gaseosos, del tipo de gases que tiran al cielo y la forma en que encaran procesos de reciclados.

Por otro lado, las comunidades inermes desde el punto de vista normativo, comenzaron a demandar atención. Entes reguladores y nuevas secretarias gubernamentales, que controlan y determinan sus medidas de seguridad medioambientales, organizaciones de protección del medio ambiente, asociaciones de defensa de los derechos ambientales. Estos son algunos de los nuevos actores con los cuales las empresas deben comenzar a comunicar.

Todos éstos “nuevos públicos” que tomaron relevancia necesitan de un trato especial, de acciones estratégicamente planificadas que pueden utilizarse para fortalecer las reputación corporativa.

Son las relaciones públicas quienes se encargaran de desarrollar acciones coherentes y beneficiosas para la empresa de modo que ésta pueda aprovechar las oportunidades que le brinda el contexto.

Se puede  decir entonces que hoy las empresas tienen en sus manos, “UNA CUESTIÓN”, que puede ser tomada como un problema o bien ser administrado con excelencia, para lograr ventajas competitivas que diferencien a la organización del resto.

¿qué se pretende decir con esto? El medio ambiente, los temas ecológicos son hoy temas que en toda planificación empresaria se debe  tener en cuenta, porque lo impone  la ley y principalmente porque lo demanda la sociedad y el mercado, entonces, si estamos cumpliendo con estos requerimientos ¿porqué no comunicarlo?, si se esta invirtiendo en ello, se debe aprovechar como una herramienta concreta.

Para desarrollar este concepto, se deberá tener en cuenta:

1- ¿quiénes son nuestros públicos?

* proveedores
* empleados
* clientes
* accionistas
* gobierno
* Medios de Comunicación
* Vecinos

 2-    ¿Cada uno de ellos exige el cumplimiento de ciertas normas?

Sí, seguro que sí, el gobierno por medio del cumplimiento de las leyes vigentes, los empleados a través de su seguridad, los Clientes demandan productos con cierto estándares y a bajo precio (tanto nacionales como internacionales), los grupos de presión cuando entiendan que una cuestión medio ambiental no es tratada como corresponde la llevan a los medios de comunicación y allí es donde las empresas comienzan a tener un problema grave, la comunicación negativa que esto genera comienza a germinar en la sociedad. Es entonces cuando la crisis supera la situación, y en esta instancia se analiza costo-beneficio y el resultado seguramente será negativo y en muchos casos perjudicará la reputación de la empresa en cuestión.

3-    ¿Cuál es la solución entonces?

La solución es considerar en el momento de organizar y planificar en las empresas el cuidado medioambiental. Una vez que se decide y la misma, forma parte del plan estratégico, el paso siguiente es elaborar una estrategia de comunicación eficiente, minuciosamente planificada y concreta. Está demostrado que si la comunidad en general, teniendo en cuenta la división de cada grupo objetivo (como se cito anteriormente) recibe por medio de distintos programas de relaciones públicas la información de qué está haciendo la organización sobre estos temas, serán ellos mismos los que construyan los cimientos para lograr  una opinión pública favorable con respecto a los productos y servicios, asegurándose de esta manera, el apoyo de cada uno de ellos a la gestión  y al negocio.

Para esto, es preciso contar con profesionales capacitados para llevar adelante estas técnicas, con un máximo grado de compromiso del Management y con políticas que apoyen la actividad. Serán profesionales quienes propondrán las diferentes estrategias y desarrollan la implementación de técnicas para generar relaciones mutuamente beneficiosas, cuidar el medio ambiente y fortalecer la reputación de la compañía.

Hoy día, las empresas que no estén al tanto de todos estos cambios y no sepan desarrollar políticas y herramientas para aprovechar esta situación están en absoluto peligro de desaparición, será fundamentalmente su competencia quién lo promueva y aproveche.

DAS Consulting