La contaminación del Riachuelo

La limpieza del Riachuelo es una de las mayores promesas incumplidas a lo largo de sucesivos gobiernos, con responsabilidades compartidas de la Nación, la provincia y la Ciudad de Buenos Aires. Mientras tanto, la contaminación sigue afectando las condiciones de vida de más de un millón de vecinos que habita en sus márgenes y deteriorando el ambiente. Una serie de fallos de la Corte Suprema se hicieron eco del reclamo aceptando una demanda colectiva al Estado por daño ambiental y exigiendo la limpieza del cauce del Riachuelo-Matanza. La autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) presentó un plan para la construcción de una obra cloacal, asepsia de basurales, saneamiento de las industrias y limpieza del fondo del río. Como parte de las obras deben erradicarse los barrios humildes de la ribera del río y trasladarse a nuevas viviendas construidas a tal efecto. Mientras tanto, la subejecución del presupuesto destinado a la ACUMAR evidencia la lentitud del proceso de saneamiento.

Las obras para el saneamiento de la Cuenca Matanza-Riachuelo avanzan con suma lentitud, mientras el presupuesto destinado para ellas se encuentra sub-ejecutado.