Asbesto

Efectos sobre la salud

Los efectos del Asbesto sobre la salud son conocidos desde hace muchísimo tiempo.

Ya en el siglo I, Plinio el Viejo, en Roma, describía la enfermedad de los pulmones de los esclavos que tejían ropa de Asbesto. El Asbesto ocasiona enfermedad cuando es inhalado. La ingestión o el contacto con la piel no son vías de ingreso demostradas como causa de enfermedad.

Las fibras (microscópicas, livianas y finas) se desprenden con facilidad e incluso sedesplazan con el aire, ingresando al pulmón con cada inspiración que se haga en un ambiente contaminado.

Las principales manifestaciones de enfermedad por Asbesto son, así, producidas en el aparato respiratorio: pulmones, pleura, bronquios.

Para 1963 un trabajo revela que la probabilidad de cáncer de pulmón en expuestos al Asbesto es mayor del 50%. Tres años antes, un estudioso del La pleura puede engrosarse (pleuritis) así como los bronquios; se desarrollan áreas de fibrosis en el pulmón, causando una enfermedad llamada Asbestosis que lleva a la insuficiencia respiratoria y termina ocasionando la muerte del enfermo.

Fue en 1906 en Londres, Inglaterra, cuando fue descripto el primer caso conocido de fibrosis pulmonar por Asbesto en un trabajador de 33 años, del área de cardado de una fábrica textil.

El Asbesto es, por otro lado, cancerígeno, considerándose que una sola fibra inhalada puede ser suficiente para desencadenar el mecanismo que origine un cáncer de pulmón o pleura, este ultimo llamado Mesotelioma.

Desde 1935 se conocen los primeros trabajos que relacionan exposición al asbesto y cáncer de pulmón y en1947 se describen los mesoteliomas de pleura y peritoneo . Mesotelioma en Sudáfrica, descubrió que la mitad de sus pacientes no eran trabajadores sino vecinos de las minas de asbesto. Esta característica es común a todas las fibras de Asbesto, no importa su variedad. Durante mucho tiempo se penso que el Mesotelioma era un cáncer típico de la exposición al Asbesto: si una persona tiene un Mesotelioma, éste ha sido causado por una exposición al amianto en el pasado. Esta asociación lineal está ahora en revisión. Estas enfermedades tienen un largo tiempo de latencia entre la exposición (inhalación de la fibra) y su desarrollo, tiempo que puede superar los 30 años. Como en todo cáncer, existe cierta predisposición individual y no se reconoce una cantidad mínima del agente causal por debajo de la cual un expuesto pueda considerarse seguro.

El hábito de fumar multiplica las posibilidades de desarrollar cáncer de pulmón en personas expuestas al Amianto. Los largos períodos de latencia antes de la aparición de las enfermedades asociadas con el Asbesto, complican muchas veces el diagnóstico porque ni los mismos enfermos asocian su mal actual con exposiciones (a veces casi circunstanciales) ocurridas 25 años atrás.

Ni la Asbestosis ni los Cánceres de pulmón y pleura tienen tratamiento especifico. La calidad de la sobrevida depende de la calidad de la atención recibida y de la calidad de vida que el enfermo presente. Pueden inferirse los números aproximados de enfermedades esperadas en un país por causa del amianto relacionándolos con el volumen de uso en dicho país y su seguimiento a lo largo de los años, teniendo en cuenta la latencia de aparición de cada enfermedad.

Así, por ejemplo, en Alemania, como en muchos otros países, se han elaborado curvas de seguimiento uso / enfermedad,dando como resultado que a pesar de haber discontinuado el uso del Asbesto en la década del ’90, el mayor numero de enfermedades se espera para dentro de 20 años.

La persistencia del Asbesto como integrante de muchos elementos que conforman la estructura de edificios en los que vivimos (caños, tanques de agua, techos, chapas y bloques de fibrocemento) indica que los riesgos de exposición no desaparecerán simplemente prohibiendo su producción y comercialización, sino que – aunque mucho más limitados- persistirán en el tiempo hasta que vayan desapareciendo las estructuras que contienen este material.

El obrero expuesto  

En países que han adoptado políticas de protección laboral altamente efectivas, el amianto es manipulado industrialmente con un cuidado que parece similar al de la manipulación de elementos radioactivos: a los trajes de seguridad con equipos de respiración autónoma se agrega el aislamiento de las fibras, que son trabajadas a través de brazos mecánicos en un ambiente al vacío.

Lejos está ese desarrollo de las condiciones de produccion y manipulación de los países de nuestra Región.

En Argentina la población trabajadora en general no solo carece de los elementos de protección personal y ambiental sino que ha sido históricamente ignorante de los riesgos relativos al Asbesto. Esta falta de conocimiento pudo haber magnificado los riesgos no solo para sí, sino también para su propia familia.

Desde 1991 los procesos productivos con Asbesto se regulaban a través de la Resolución 577 del Ministerio de Trabajo. En la misma estaban contemplados aspectos relacionados con la protección personal, así como con el etiquetado del producto final, el transporte, almacenamiento y disposición de desechos, incluyéndose la obligatoriedad del uso de equipo de protección respiratoria y la recomendación de sustituir las fibras por otras de menor peligrosidad.

Dicha Resolución, enmarcada en la entonces política del “Uso Seguro del Amianto”, si bien significo un avance conceptual frente al vacío regulatorio anterior, probó su ineficacia a través del tiempo del mismo modo que fracasó en todos países que la adoptaron.

No sólo la insuficiencia en los mecanismos de fiscalización; los altos costos de una producción de esas características, y el hecho de seguir incorporando un elemento cancerígeno a la infraestructura urbana, permiten definir dicha política como no sustentable, a pesar de la minuciosa y particular excelencia que muchas normas de regulación han presentado.

TODO TRABAJADOR TIENE DERECHO:

• A proteger su salud y exigir los recursos que a tal efecto disponga la mejor tecnología existente.
• A CONOCER LOS RIESGOS que el Asbesto representa para su Salud y la de su Familia.
• A contar con PROTECCIÓN adecuada al riesgo que maneja !” A exigir un monitoreo ambiental y médico PERIODICO.
• A una justa asistencia MEDICA Y FINANCIERA en caso de enfermedad profesiona.
• A organizarse, como ciudadanos, en función del DERECHO COLECTIVO A LA REPARACIÓN DE DAÑOS.

La Resolución 577 identificaba a los trabajadores expuestos: los afectados a tareas de:

• minería y molienda
• Fumistería
• Construcción naval y desguace
• Fabricación de filtros
• Aislamientos térmicos
• Fabricación de Juntas y cintas de freno
• Industria del Fibrocemento
• Hilandería y Tejeduria de amianto
• Reparación de materiales de fricción
• Recubrimiento de tuberías y calderas
• Reparación, mantenimiento y demolición de estructuras con asbesto instalado
• llavado de ropa de trabajo contaminada con Asbesto
• Mantenimiento de maquinas y filtros contaminados
• Cualquier otra actividad que involucre Asbesto o materiales que lo contengan

El uso del Asbesto en estas actividades laborales quedó prohibido a partir de la vigencia de la Resolución 523/01 del Ministerio de Salud. Sin embargo, todas las personas que las desarrollaron durante los últimos 30 años, siguen en riesgo.

En muchos países del mundo ex trabajadores del Asbesto y víctimas de alguna enfermedad con él relacionada se han organizado en grupos de ayuda que facilitan el acceso a información y asesoramiento médico y jurídico. Estos grupos no sólo se ocupan de prestar estos servicios, sino que participan en la divulgación de información científica, intercambian datos sobre los avances relacionados con la reducción de riesgos en distintos países, colaboran en el seguimiento de actividades de control y fiscalización, apoyan técnica y financieramente la realización de conferencias y reuniones internacionales y han sido un fundamental apoyo en la modificación de las políticas con respecto al Asbesto para muchos gobiernos.

La familia del trabajador

A pesar de que la Resolución 577/01 del Ministerio de Trabajo ha previsto hasta las dimensiones de los baños que un trabajador debe tener disponible para su ducha a fin de cada jornada y los sistemas de lavado de la ropa de trabajo (a cargo del empleador), la realidad es que con extremada frecuencia los obreros llevan esa ropa a su casa, en cuyo ambiente se liberan fibras de amianto y en donde es lavada, generalmente por la madre, la compañera, la hermana. Así, el riesgo del trabajo se transfiere al hogar y nuevos expuestos no laborales se suman. Muchas mujeres familiares de trabajadores han enfermado por esta causa y de hecho, esto ha sido un frecuente hallazgo en muchos países que monitorean cercanamente la enfermedad en su población, o que han sufrido epidemias poblacionales de enfermedades asbestósicas.

El barrio

Vivir en los alrededores de una mina, un molino de Asbesto o una fábrica que lo trabaje, tiene también sus riesgos de exposición directa. Por acción del viento las fibras pueden ser transportadas por el aire hasta cinco cuadras alrededor de la fábrica. Por otro lado, un transporte inadecuado que acarree el polvo, fibras o sus residuos, puede “regar” Asbesto a mucha mayor distancia aun.

Los habitantes de dicho barrio se ajustan a una tercera categoría de riesgo, luego de trabajadores y sus familias, que los pone en una situación intermedia entre la población laboral y la población general con viviendas alejadas de un sitio de producción. Notificar de esta situación al médico personal o circunstancial y solicitar un control radiográfico anual, son ejercicios de un buen control sobre la propia salud en este caso particular.

La organización de los vecinos para exigir el cese de actividades clandestinas puede onsiderarse por el barrio como una buena idea para cuidar la salud de todos. Las demandas en este sentido podrían dirigirse a las áreas de Salud o Trabajo del Ejecutivo Municipal y/o provincial.

Las existencias de residuos de Asbesto mal dispuestos deberían informarse a Los vecinos, asimismo, pueden convocar a reuniones y talleres para informarse de riesgos y sus alternativas, solicitando información y apoyo de sus autoridades locales para este fin. Muchas Organizaciones No Gubernamentales ya existentes en la comunidad pueden, asimismo, hacerse cargo de las propuestas de los vecinos y canalizar las preocupaciones de las respectivas áreas de Medio Ambiente. manera más efectiva.

Las construcciones

La importación de más Asbesto al país, así como la producción de bienes que lo contengan, están ya superadas o restringidas en la actualidad. Los edificios, públicos o privados, sin embargo, persistirán y también las cañerías, caminos y rutas ya construidas con fibrocemento. Su deterioro es un riesgo para los usuarios y su mantenimiento y reparación el principal riesgo laboral por Asbesto que se espera tener de ahora en más.

No es infrecuente la situación de demolición de un edificio. En la ciudad de Buenos Aires recordamos la implosión del Albergue Warnes y los atentados contra los edificios de la Embajada de Israel y la AMIA; en el conurbano la demolición de dos estructuras en el barrio conocido como “Fuerte Apache”. ¿Estaban construidos con Asbesto?

En muchos países el Asbesto se utiliza como elemento de bacheo y construcción de rutas, mezclado con cemento. ¿Se evalúa la frecuencia de reparación de pavimento deteriorado y la protección de quienes lo reparen? Razones estéticas a veces motivan la renovación de estructuras habitacionales, familiares o públicas. ¿Con qué mecanismo se evita la dispersión de fibras a partir de paneles decorativos sobre la base de Asbesto?

En los edificios horizontales de las grandes ciudades, los encargados son los responsables de la vigilancia y mantenimiento de las calderas, frecuentemente recubiertas de Amianto. ¿Están informados de los riesgos y pueden obrar en consecuencia?

En todos estas situaciones, la posibilidad de que las fibras puedan desprenderse exige un tratamiento especial, la existencia de personal técnico capacitado, la disponibilidad de infraestructura y una metodología específicas para la remoción del Asbesto, minimizando riesgos para trabajadores y ambiente.

En este sentido se está trabajando para perfilar la figura del Demoledor Profesional. En todo caso, los procesos de reparación y demolición de edificios resultarán más costosos y más complicados de planificar y llevar a cabo.

Otro uso frecuente del Amianto, generalizado a principios del siglo XX, fue la pulverización superficial de paredes en ambientes necesitados de una aislamiento acústica importante: teatros, cines, salas de concierto.

El amianto así aplicado, persiste todavía en algunos edificios y presenta un riesgo superior al incorporado en el cemento, ya que no se encuentra encapsulado; por otra parte se exponen a él miles de personas por año.

El Usuario

Quienes no trabajamos con asbesto, no tenemos familiares en tareas laborales asociadas ni vivimos en las cercanías de una planta industrial, tenemos todavía contacto esporádico con el Asbesto a través de muchas estructuras, elementos e insumos disponibles en el hogar. Sin embargo, en la inmensa mayoría de ellos el Asbesto se encuentra “encapsulado”, encerrado al interior de un artefacto o formando parte de la estructura edilicia, con lo cual la liberación espontanea de fibras hacia el ambiente es poco probable.

Se constituye así la cuarta categoría de riesgo, evidentemente de exposición muy inferior a las otras tres en circunstancias normales.

Estas circunstancias, sin embargo, pueden variar.

Antes de la prohibición podía ser usual encontrar en las casas guantes, delantales o manoplas para el horno elaboradas con amianto, difusores de cartón- Asbesto para las hornallas, separadores (planchas hechas con amianto que aíslan la cocina de las mesadas ), o las fundas de las tablas de planchar. Menos riesgoso – aunque también presente- es el Asbesto incorporado a ciertos aparatos electrodomésticos aprovechando sus características de aislante termoeléctrico (estufas, secadores de pelo, planchas, tostadoras eléctricas).

Por último, el Asbesto puede formar parte de las casas que habitamos (paredes de fibrocemento, tanques de agua, cañerías, techos de chapa de fibrocemento, recubrimientos aislantes de terrazas) o como cubierta externa de las calderas de calefacción en muchos edificios de departamentos. Salvo esta ultima categoría (Asbesto instalado en estructuras de la construcción) todos los demás usos están hoy prohibidos en el país. Sin embargo puede ser que persistan en los hogares muchos de estos productos e insumos, que el deterioro vuelve peligrosos. ¿Qué Hacer?

1- El Asbesto “encerrado” en artefactos electrodomésticos no debe presentar un problema hasta que los mismos se rompan y exijan un arreglo. En ese caso es importante avisar, a quien se encargue de su reparación, sobre la posible existencia de amianto en el interior del aparato, para extremar precauciones.

2- Los elementos de textil-Asbesto (guantes, manoplas) o cartón-Asbesto (difusores para hornallas) son más fácilmente deteriorables y en ese caso capaces de liberar fibras al aire que se respira. Si existe la posibilidad de descartarlos, es preferible esta opción

3- Muchas casas tienen planchas de fibrocemento para aislar estufas, cocinas o calefones de paredes o muebles aledaños. Como para todos los otros usos del asbesto, existen alternativas de menor riesgo: fibras sintéticas o fibras de vidrio con las cuales ya se construyen elementos de reemplazo. Son la opción preferencial en caso de una oportunidad de cambio motivada por el deterioro del material original. En cambio, si éste no está deteriorado, se aconseja “no tocar”, vigilar el estado de la estructura a lo largo del tiempo asegurándose de su aptitud sin correr el riesgo de innecesarias manipulaciones que pueden resultar (en sí mismas) un peligro mayor.

4- El mantenimiento y reparación de las estructuras con Asbesto instalado (paredes, techos, revestimientos, molduras, tanques de agua, cañerías, y calderas) deberá ser siempre estudiado y resuelto por un especialista. Con respecto a las cañerías y al tanque de agua cabe recordar que no está científicamente probado en la actualidad que el Asbesto cause perjuicios por vía digestiva (ingiriendo, por ejemplo, agua con cierto contenido de fibras que pudieran desprenderse del tanque). Sin embargo hay alternativas disponibles también en este sentido, a partir de ofertas de productos de plástico y de acero inoxidable.

Vulnerables

1– Algunos recubrimientos con los que se aíslan los techos de muchas casas (membranas o pinturas que se aplican en las terrazas con las cuales se protegen los cielorrasos, fundamentalmente de la humedad) contienen asbesto. La exposición de los habitantes de dichas viviendas al deterioro, es muy escasa. Sin embargo, muchos techos de viviendas precarias son simplemente chapas acanaladas de fibrocemento. La exposición de sus habitantes al deterioro es mucho mayor. El desconocimiento del riesgo, la limitación de su acceso a niveles preventivos y asistenciales de Salud, las dificultades para modificar las construcciones de sus viviendas y la crónica situación de desventaja social y económica, magnifican esta situación de riesgo.

2- Las condiciones de salud y trabajo de grandes sectores poblacionales están condicionadas por una crisis de empleo nunca vista en el país, coincidente con un Estado limitado en sus funciones y con escasos mecanismos de respuesta. En este panorama se torna difícil – sino imposible- participar en las decisiones relacionadas con la Salud y la Seguridad laboral, menos aún con el ejercicio de la libertad de elección ó de demanda por mejores condiciones de trabajo. El trabajador que participe en tareas relacionadas con el Asbesto tiene pocas posibilidades de exigir información y cuidados.

3- Los chicos que concurren a Escuelas Técnicas aún pueden tener acceso directo al trabajo con planchas de amianto en los Talleres o utilizar ropa ignífuga hecha a base de este material. En un contexto no laboral, muchos jóvenes de menos de 18 años pueden continuar con esas prácticas, sin que suficiente protección ni información (hacia ellos y hacia sus padres) sean brindadas por las autoridades del colegio.

Estos son ejemplos de poblaciones vulnerables, más sensibles a estar involucradas en un indeseado contacto con Amianto, sujetas a menos acciones de prevención y educación.

Así, si bien las sustancias cancerígenas no discriminan población objeto, la forma en que una sociedad se estructura a sí misma esta relacionada con la posibilidad de afectación de grupos específicos con respecto a otros. El Asbesto, que es un problema de Salud Pública, se constituye así en un indicador de inequidad y está íntimamente relacionado con el desarrollo y la calidad de vida de un país.

Anexos

1- Países cuyos gobiernos han prohibido el Amianto:

• Alemania
  Francia
  Italia
  Gran Bretaña
  Chile
  Luxemburgo
  Argentina
  Arabia Saudita
  Eslovenia
  Austria
  Islandia
  Finlandia
  Noruega
  Emiratos Arabes
  Nueva Zelandia
  Bélgica
  Dinamarca
  Holanda
  Polonia
  República Checa
  Suecia
  Suiza
  España
  (a): Portugal y Grecia

Países en los que el Amianto ha sido restringido en Estados o Provincias, o Municipios: Brasil – Australia

En 1991 el Banco Mundial estipuló, como política, su preferencia de no financiar la manufactura o el uso de productos conteniendo asbesto.

El 4 de Mayo de 1999, la Comisión Técnica de la Unión Europea aprobó la Prohibición de uso de cualquier tipo de amianto a partir del 1/1/2005 para aquellos países que todavía no lo prohibieron.(a)

“ El cambio en las formás de Vida, de Trabajo y de Ocio afecta de forma muy significativa a la Salud. El Trabajo u el Ocio deben ser una fuente de Salud. El modo en que la sociedad organiza el trabajo debe contribuir a la creación de una sociedad saludable”. Carta de Ottawa para la Promoción de la Salid. Organización Mundial de la Salud. 1986

2- Glosario

Silicatos : Sales formadas a base de Sílice, elemento mineral presente en la corteza terrestre.
Metamórficas: Dícese de las rocas formadas a partir de otras rocas preexistentes (ígneas o sedimentarias) que sufren cambios al encontrarse en condiciones de alta presión y temperatura. Los minerales más comunes así formados son Sílice, Feldespato, Piroxeno y Anfiboles
Sedimentarias: Dícese de las rocas formadas mediante procesos de deposición de materiales arrastrados por el viento o el agua, en áreas determinadas. Pueden proceder de la erosión de rocas preexistentes, de precipitación de sustancias en disolución o de depósitos orgánicos vegetales o animales del lugar en que habitan.
Exposición: Situación en la que una persona puede tomar contacto, a través de cualquier vía (inhalatoria, dérmica, digestiva), con un elemento capaz de generar un daño.
ART : Empresa privada que brinda a otra empresa un seguro a través del cual se otorgan prestaciones asistenciales y dinerarias a los trabajadores víctimas de accidentes o enfermedades relacionadas con el trabajo. Estas empresas están reguladas por la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, Ministerio de Trabajo, Empleo y Formación de Recursos Humanos.
Carlomagno: (742- 814) Rey de los Francos. Emperador de Occidente
Micrón: Milésima parte de un milímetro
Latencia : tiempo que transcurre entre la exposición a un riesgo y la aparición de la enfermedad.