Aguas limpias. Segunda parte
- Creado por admin
- El 18 octubre, 2004
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Manejo, gestión o control de la contaminación
Son sistemas que intentan manejar o gestionar la contaminación. Pone su atención en lo que sucede al “final de la tubería”, es decir, una vez que los residuos ya se han generado.
Se basa en el principio de asimilación, que considera que el ambiente está en condiciones de asimilar los contaminantes que recibe.
Basa la protección de cada ambiente en exigir a las diferentes industrias no superar ciertos niveles de emisión de algunos contaminantes. Una de sus consecuencias es la transferencia de las sustancias de un medio al otro pero la carga contaminante total en el ambiente no disminuye.
Para evitar superar los límites de sustancias en los efluentes, se puede lograr que éstos permanezcan en los filtros de tratamiento. Si esos filtros son luego incinerados o enterrados, las sustancias contaminantes irán a la atmósfera o contaminarán el suelo y las napas de agua subterráneas.
Son pocas, de todos modos, las sustancias contempladas, para la mayoría de los compuestos ni siquiera existen normas.
Tampoco éstas tienen en cuenta el efecto simultaneo de todas las sustancias ni la complejidad de la composición de los efluentes y de las emisiones, donde una amplia gama de contaminantes diferentes no puede ser manejada adecuadamente.
Prevención de la Contaminación
Este enfoque, al aceptar que una vez generadas las sustancias contaminates la eliminación de los riesgos asociados a ellos es muchas veces imposible, promueve la prevención de esa contaminación desde su origen, desde su propia fuente.
Es necesario evitar la generación de residuos aplicando tecnologías limpias, que no emplean materias tóxicas ni suponen un riesgo para los humanos.
En lugar de intentar controlar o manejar los vertidos o invertir en millonarios sistemas de tratamiento de efluentes, la reducción progresiva de la generación de contaminantes mediante la reducción del uso y producción de residuos permite solucionar el problema.
Para empezar a cambiar el proceso de generación y eliminación de contaminantes es necesario:
1-Proveer mecanismos financieros y facilitar líneas de crédito que permitan reemplazar las sustancias empleadas y producidas.
2-Prohibir la producción, importación y uso de productos peligrosos.
3-Realizar investigaciones epidemiológicas y sobre los niveles de contaminantes en cursos de agua, alimentos y leche materna, especialmente en las áreas más castigadas por la contaminación.
4-Establecer un programa de prevención de la contaminación por residuos que contemple, entre otros puntos: la prevención del consumo y vertido de productos contaminantes.
5-Dar origen a una campaña de difusión de información, en colaboración con entidades vecinales y de consumidores destinada a evitar el uso de sustancias nocivas en los hogares.
6-Implementar un plan de reemplazo de envases descartables y de recuperación de la fracción orgánica para producir abono.
7-Otorgar un tratamiento terciario completo a los residuos cloacales.
8-Prohibir el vertido al sistema cloacal de residuos industriales.
El derecho a la información
Actualmente, no existe información completa sobre las descargas de contaminantes a los cursos de agua, ni en manos de las autoridades ni de la comunidad, lo que da origen a un problema de contaminación secreta de dimensiones desconocidas.
La información existente se refiere a unos pocas sustancias contaminantes y esta en manos de distintas autoridades y organismos a nivel nacional, provincial o municipal, que en ocasiones no tienen contacto entre sí.
Los datos disponibles no permiten responder preguntas básicas sobre la evolución y las tendencias de los vertidos.
A menudo, las propias industrias desconocen qué compuestos y en qué cantidades exactamente están eliminando.
Las millones de personas que conviven con industrias que perjudican su salud directa o indirectamente, no gozan de su derecho a conocer las sustancias contaminantes a los que están expuestas para poder tomar medidas preventivas o hacer valer su derecho a un ambiente sano.
Para esto es necesario una ley que:
Establezca la reducción obligatoria de la generación de residuos contaminantes a través de la disminución progresiva de la utilización y producción de residuos por parte de la industria. La ley deberá contener compromisos con plazos y porcentajes concretos.
Elementos que esta ley debe contemplar
1-Exigir la presentación de planes anuales de reducción y emisión de tóxicos de la fuente.
2-Establecer los métodos para medir la reducción en la fuente por parte de las industrias
3-Facilitar la adopción de técnicas de reducción en la fuente por parte de las industrias y desarrollar un Centro de Información técnica en una Universidad u otro organismo público, que investigue y desarrolle alternativas de producción más limpias para los procesos industriales.
4-Definir los tóxicos abarcados por la ley. La lista deberá aumentar paulatinamente y se priorizarán en los planes los metales pesados y los contaminantes orgánicos persistentes.
De esta manera, no sólo se le reconocería a la comunidad uno de sus derechos sino también aumentarían los mecanismos de control sobre los avances reales hacia la disminución de las emisiones tóxicas.
Las autoridades nacionales –ejecutivas, legislativas y judiciales- podrán mejorar significativamente su capacidad de monitoreo, regulación y control sobre las sustancias de las industrias, proporcionar una uniformidad regulatoria a nivel nacional que dará la base a través de la cual se podrá evaluar la gestión de las industrias y de los distintos organismos gubernamentales y proveerá a la comunidad de herramientas que le permitirán proteger su salud y la del medio en que vive.
Es importante recalcar que sin la información requerida por los inventarios de contaminantes, las industrias no pueden determinar cómo disminuir el uso de compuestos tóxicos. Al analizar los datos de empleo de sustancias tóxicas, pueden aparecer oportunidades para la sustitución de esos compuestos por otros menos tóxicos y más seguros, para la identificación de puedan reemplazarse por otros menos peligrosos y para el desarrollo de nuevos métodos de reducción que no sólo protejan a la comunidad y el ambiente, sino que también permitan ahorrar dinero y estimular el desarrollo de nuevas tecnologías.
Cristian Frers.
Técnico Superior en Gestión Ambiental.
Técnico Superior en Comunicación Social.
Tte. Gral. Juan D. Peron 2049 7mo. “55”. (1040) Capital Federal.
República Argentina.
E-mail: [email protected]
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